
Bótox: cómo es el innovador tratamiento para el bruxismo
El bruxismo es una afección frecuente en personas que sufren de estrés y ansiedad; si no se trata a tiempo, puede destruir el esmalte y la dentina. Para quienes sufren de esta condición, la toxina botulínica puede ser de gran ayuda.
25 de agosto de 2022

Cómo es el tratamiento con bótox para el bruxismo - Créditos: Canva.
Si bien siempre existió, durante la cuarentena tomó mayor protagonismo. El bruxismo -o el rechinar los dientes- es una patología que puede darse de forma temporal o permanente. “Si por las mañana se siente un dolor en la mandíbula y en la zona del oído, incluso con cefaleas tensionales, es muy probable que se sufra una alteración que produce daño en la articulación temporomandibular, especialmente en el músculo masetero; esta patología suele derivar en bruxismo o rechinar de dientes y su solución está en el tratamiento con bótox”, nos contó la Doctora Adriana Chiavazza, especialista en ortodoncia.
Siempre que el paciente esté bajo el control de médicos expertos, la toxina botulínica es eficaz, segura y consigue relajar la musculatura de tal manera que hace desaparecer el dolor y las molestias a las pocas semanas de su aplicación clínica.
¿Cuáles son las causas del bruxismo?
“El estrés es un factor desencadenante: es una situación bastante común; las personas que sufren de ansiedad y miedo o situaciones estresantes lo manifiestan a través del rechinar de los dientes cuando se duermen y aflora toda esa tensión que se ha guardado en el subconsciente, apretando la mandíbula” detalla la especialista.
El bruxismo puede ser espontáneo (primario) o estar asociado a otras enfermedades (secundario): el primero se da cuando no existe una causa definida ni obedece a otros problemas médicos, suele estar relacionado a la tensión. El segundo, por el contrario, se puede diagnosticar un origen concreto o está asociado a enfermedades, principalmente, neurológicas (epilepsia, Parkinson, etc.). Este rechinamiento involuntario puede provocar un dolor en los músculos del oído, cuello y mandíbula y no es extraño que ocasione cefalea tensional; además, ocasiona desgaste dentario y sangrado en las encías.
También puede llegar a modificar la fisonomía facial, generando el aspecto de una cara cuadrada desde el punto de vista estético. “Existen dos tipos de manifestaciones dentarias de bruxismo: el deslizamiento (la más común, produce un desgaste en las piezas dentarias llegando, en casos severos, a destruir el esmalte y la dentina) y el apretamiento, que se expresa con lesiones ubicadas enel cuello del diente. Es muy importante hacer esta aclaración porque muchos de estos pacientes, mal diagnosticados, no tratan la enfermedad pensando que este desgaste es producto de un cepillado excesivo o de cerdas duras: grave y frecuente error. Estos problemas se pueden remediar con el uso de una placa de relajación y con el uso de bótox”, nos explicó Adriana.
¿Cómo es el tratamiento con bótox?
El bótox, a diferencia de la placa de relajación, produce un efecto permanente las 24 horas por 6 meses. Se emplea para relajar el músculo más potente que tenemos en la masticación, el masetero. Al relajarlo, la articulación temporomandibular queda libre de tensiones y, aunque la persona siga sufriendo ansiedad por las noches o continúe preocupada o temerosa por el día, con el bótox se consigue la relajación del músculo, sin esfuerzo alguno.
“La aplicación de la toxina botulínica es prácticamente asintomática, el tratamiento es casi indoloro; las inyecciones de bótox apenas duelen. Se realiza una exploración minuciosa de los músculos maseteros, analizando los puntos de máxima tensión en la zona facial; en buenas manos, es un fármaco eficaz y muy seguro. El resultado de la intervención se observa a los diez días o dos semanas una vez iniciado el tratamiento” aclara Chiavazza.
La articulación de la zona temporomandibular se encontrará mucho más relajada y el paciente notará que se levanta por las mañanas con una menor sobrecarga; “cuando comen, por ejemplo, carnes, pan tostado o zanahorias crudas ya no les duele o se les queda bloqueada la mandíbula”. Con este tratamiento se obtiene un bienestar mandibular de entre seis y doce meses y cada tanto se deben ir implementando otras sesiones de botox y complementando con el uso de la placa de descanso
SEGUIR LEYENDO


El yuyo que hay que ponerle al mate para dormir mejor
por Redacción OHLALÁ!

La sobreinformación afecta nuestra salud mental: claves para regularla
por Cecilia Taburet

¿Qué es la histerectomía laparoscópica, la intervención que nombran en Cónclave?
por Verónica Dema

¿Por qué la ESI es clave para prevenir el abuso sexual infantil?
por Verónica Dema
