¡¡Buen día a todos!! ¿Qué me cuentan que parece lunes pero es miércoles? ¡¡¡Qué placer!!! Todas las semanas deberían ser así. ¿Qué tal el fin de semana?
El mío estuvo bueno. Comenzando porque el viernes me junté con Nicolás en el estudio de mi abogada (ahora es una sola). El divorcio avanza. En breve tenemos la primer audiencia de conciliación.
Arreglamos algunos asuntos como que la cuota por alimentos va a empezar a ser depositada en mi cuenta del banco. Mucho mejor y más práctico.
Hablamos lo de la casa y Nicolás dice que quiere algunos muebles pero que su parte de la plata quiere que sea para los chicos, así que decidimos que la vamos a guardar para ellos. OK, me parece justo y a la vez me da una gran tranquilidad.
Muy probablemente el comprador sea el hermano del padre de Nicolás. Sería buenísimo.
El sábado a la mañana estuve HORAS viendo y marcando departamentos para ver. Desde Colegiales, pasando por Belgrano, hasta Villa Urquiza. Tengo 10 mil. Bien.
Luján está perfecta (de hecho en este momento se está cambiando para bajar a desayunar y partir al colegio).
El sábado se fueron todos a lo de su padre y yo salí con Cariló. Bueno, "salí" con Cariló. Me vino a buscar a casa tipo 8. Yo no estaba lista, lo hice pasar y nunca nos fuimos.
Terminamos pidiendo comida, tomando un vinito y me siento una imbécil por esto, fumando un cigarrillo en el jardín. Se quedó a dormir.
El domigo me despertó el teléfono: Nicolás que me llamaba para saber si podía llevarse a los chicos a la quinta de un amigo. Allá partieron, hasta el lunes.
Cariló y yo anduvimos por la ciudad. Desayunamos afuera, almorzamos afuera y nos enclaustramos en su casa desde las tres de la tarde hasta las once de la noche, momento en el que volvimos a salir para comer.
Cariló es MUY divino. Me encanta y me potencia. Me dice que me quiere y me hace poner colorada.
Ahora mismo, mientras me tomo este mate, siento que lo quiero.