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- DAS LOCA
Querés entrar al laburo con la SUBE (o pagar el bondi con la tarjeta del laburo).
- PERDÉS LA DIMENSIÓN DEL TIEMPO
Vas a la cita con el médico..., pero un día antes.
- LO COTIDIANO SE VUELVE UNA TAREA COMPLICADÍSIMA
Ponés la yerba adentro del termo y no en el mate.
- TE AUTOMATIZÁS GROSO
Querés bajar el volumen de la tele con el celular.
- TE OLVIDÁS DE FECHAS MUY IMPORTANTES
Tu propio aniversario. O el cumpleaños de tu mamá (que se enoja porque no la llamaste).
- LLORÁS MUY SEGUIDO
Y sí, cuando ya agotaste todos los recursos, pinta el llanto a lo Andrea del Boca por una pavada.
- DESARROLLÁS UN LEVE ALZHEIMER TEMPORARIO
“Ay..., ¿qué iba a hacer?” y “No me acuerdo de lo que te iba a decir” son tus nuevas frases de cabecera.
- QUE TE CONTRADIGAN PASA A SER MUY MALA IDEA
Podés responder con un par de gritos pelados, una cara que mete miedo... o incluso algún objeto volador.
- TU CARA TE VENDE Y TODOS TE PREGUNTAN
Las ojeras no mienten jamás, pero aun así te encontrás diciéndoles a todos: “Estoy bien, solo un poco pasada”.
- TE ENFERMÁS
Cuando no parás, tu cuerpo solito se encarga de que te metas un par de días en la cama. ¿O te creías Wonder Woman?
¿Te sentís identificada con alguno de estos síntomas? Además te mostramos 7 claves para meditar en 5 minutos
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