Llamó el señor mayor. Cuando casi me había olvidado de su existencia, llama. No llegué a atender porque, que se sepa: había salido a correr a pesar del frío polar. (Estoy harta de escuchar de la "ola polar". ¿Qué esperaban? Es invierno!).
No estar me dio tiempo de escuchar el mensaje y meditar un rato acerca de lo que quiero. Estoy tan perdida. No sé qué pensar. ¿El hecho de que este tipo no se me haya cruzado por la cabeza ni una vez en estos días es significativo? ¿Quiere decir que no me gustó ni un poco? ¿Soy una cerrada y no le estoy dando una oportunidad? ¿Te puede gustar alguien después de mucho tiempo de verlo o tiene que haber flechazo a primera vista y eso es lo que funciona a largo plazo?
Puff, pasa el tiempo y lejos de tener más respuestas me voy llenando de muchas más preguntas de las que tenía antes. A veces envidio a esa gente que se casó a los 24 y nunca más tuvo que pensar nada. (Lo que acabo de decir es una mentira total, nadie nunca se queda sin replanteos acerca de su vida, pero déjenme engañarme por un ratito con que había una forma más sencillita de vivir).
Buen martes polar para todos. ¡Celebremos que hay sol!
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