Tu momento para despegar puede ser este. - Créditos: Shutterstock
¿Cuál es tu breaking point? ¿Cuándo es el momento de pasar de la relación de dependencia a ser emprendedor? ¿ Cómo hacer para separarte del trabajo estable? ¿Cómo dar el salto? Todas estas preguntas hizo Gustavo Teruel, más conocido como "Teru", en la segunda clase de OHLALÁ! Makers sobre planificación de emprendimientos. Teru es cocinero, creador de @cocinandoconteru, donde difunde la corriente de alimentación para niños BLW (Baby Led Weaning). También es fundador de la escuela de cocina para niños Lila y el restaurante a puertas cerradas Carnero.
Muchas personas comienzan con su emprendimiento mientras están en un trabajo en relación de dependencia. Ese fue el caso de Teru que, entre planillas de oficina, escribía sus posts de @cocinandoconteru. "Pero todo el día estaba pensando en el proyecto, desde que me levantaba hasta que me iba a dormir. Además, los fines de semana daba los talleres de BLW. Había algo que me faltaba. Iba a trabajar sin ganas", relató.
El cocinero contó su experiencia en uno de sus primeros trabajos en una empresa, donde los dueños venían de una multinacional de tecnología y, en plena crisis del 2001, decidieron fundar su propia compañía. Este aprendizaje fue fundamental para él. "No lo entendí durante muchos años, hasta que yo mismo di el salto. Llega un punto donde lo sentís. Cuando es el momento, te empieza a temblar el cuerpo. Ahí sabés que tenés que apostar a todo, jugártela y renunciar al sueldo fijo a fin de mes", explicó.
Los nervios, dudas e incertidumbre son parte del camino emprendedor. "Es fundamental sentir esa incomodidad en el momento donde uno quiere dar el salto. Si estás muy cómodo no lo hacés", aseguró Teru. Emprender es como tirarse a la pileta, sin certezas. El desconcierto también es parte del proceso. "Yo prefiero ser la cabeza de algo chiquito, que ser parte de una mega empresa donde soy el último de la fila y donde las decisiones no pasan por mí", concluyó.
"Llega un punto donde lo sentís. Cuando es el momento, te empieza a temblar el cuerpo. Ahí sabés que tenés que apostar a todo, jugártela y renunciar al sueldo fijo a fin de mes". Gustavo Teruel.
En el encuentro dio algunos consejos para animarse a saltar a la aventura de emprender:
- Anotar. Es importante bajar a un papel las ideas, para poder visualizar el emprendimiento, ordenarse y planificar. Pensar en cuál es el objetivo y alinearse con él.
- Ahorrar. En lo posible, recomienda separar veinticuatro sueldos, mientras se está en el trabajo en relación de dependencia, para luego lanzarse a emprender con un respaldo.
- Capacitarse. Es clave ser una esponja: aprender todo lo que se pueda, hacer cursos, incluso de herramientas que no parecieran tener que ver con el tema del emprendimiento.
- Compartir. En el tránsito hacia el emprendimiento, es esencial charlar y nutrirse de personas que están en la misma situación.
- Animarse. No hay que esperar al "momento correcto", porque no existe. Ya sea por la estabilidad que brinda la relación de dependencia, por las crisis del país, por los miedos, siempre va a haber excusas. Si no se salta, uno nunca va a sentir la satisfacción de lograr su emprendimiento.
En resumen, lo más importante para saber cuándo lanzarse a emprender es conocerte a vos misma y sentir realmente como una necesidad esto de abrirte por tu cuenta. Cuanto más puedas planificarlo y cuanto más puedas ahorrar para hacerlo, más sencillo va a ser para vos. Pero dejá de lado las excusas como la inestabilidad del país o los miedos porque si no nunca lo vas a hacer.