¿Están preparados para ganar en el concurso de hoy? En medio de la vorágine del trabajo, estuve leyendo los comentarios que dejaron y me pareció que lo mejor era hacer una explicación general sobre por qué incorporamos a Twitter esta vez. Y, más allá de querer presentarles una propuesta distinta e innovar un poco más, una gran razón es que Twitter te permite el dinamismo y la practicidad para poder realizar este tipo de actividades on line donde hay más de una consigna, es decir, cuatro preguntas que responder en diferentes horarios. Considerando que quizás hubiera quienes no tienen una cuenta en esta red social, decidimos contar el ABC del concurso el día lunes para que tuvieran tiempo hasta hoy de crear una. Para consultar las bases y condiciones legales, por favor entren a este link.
Además del concurso, hoy les cuento que volví ayer a mi casa después de un par de semanas en París donde no paré. Así que, como ya se imaginan, estoy feliz por el reencuentro y también por otro motivo. El sábado llegan a Londres mi hermana Ximena (con quien además somos íntimas amigas, muy unidas), junto a su marido y mi sobrina Martina, la pre adolescente más linda y viva que conozco, je.
Aunque ellos suelen venir a Londres, pensé un listado bastante apretado de cosas para hacer y lugares para ir, aunque a la vez son programas muy relajados. A mi hermana le encanta caminar toda la ciudad sin piedad. Digamos que duerme cero hora por día con tal de llegar (a pie) hasta el último rincón del lugar a donde vaya y cuando está por volver a Argentina siempre me reclama que le quedó algo pendiente. Son paseos que me encanta hacer con ellas dos cada vez que estoy libre. Es un clásico escuchar a lo lejos a mi sobrina preguntarle mil veces "mamá, ¿cuánto más vamos a caminar?", pero entre las tres también tenemos conversaciones eternas y momentos únicos que me hacen inmensamente feliz. Es como volver a Buenos Aires sin haber subido a un avión. Por la noche, no pegamos un ojo: con Ximena nos quedamos hablando hasta muy tarde y a la mañana siguiente la competencia entre las dos es ver quién se levanta antes para hacer el desayuno más rico y sorprender a todos. Son días de pura familia en los que trato de estar tranquila con el trabajo para disfrutarlos lo más posible.
Martina tiene once años y me encanta porque llega con su agenda personal totalmente preparada de los lugares a los que quiere ir y lo que le gustaría hacer. Nos identificamos en muchas cosas, pero en especial porque no sale a ninguna parte sin su máquina de fotos para captar absolutamente todo lo que le llama la atención.
Y mi cuñado, que es chef y cocina como los dioses (verán que ellos son la familia perfecta, je), hace que esta visita sea aún más inolvidable: ¡comemos como en casa todos los días! Y su risotto con hongos es mi debilidad.
Falta poquito para que lleguen, pero yo los espero con ansiedad desde hace semanas.
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