La apertura que merece un brindis

Así, desde el sábado 5 de marzo los amantes de este rincón del país y de sus mejores frutos tendrán una nueva excusa para volver. Es que para ese día se espera la inauguración del Museo de la Vid y el Vino.

Proyecto del estudio de los arquitectos Berro y Borlasca, responsables también del Glaciarium, el nuevo museo dedicado a los glaciares en El Calafate, el museo salteño consistirá de dos edificios en los que el vino de los Valles Calchaquíes contará su historia.

Uno es justamente la antigua construcción de mediados del siglo pasado donde originalmente funcionó el primer museo de la ciudad. Hoy, totalmente restaurado, mostrará la sección histórica de Cafayate, sus antiguas culturas, el cultivo de la vid de los jesuitas, los primeros bodegueros y los pioneros que hicieron el lugar.

Por su parte, el nuevo edificio, una moderna construcción, albergará la denominada Memoria de la Vid, donde a través de innovadoras técnicas de exhibición, con efectos escénicos, lumínicos, programas multimedia y presentaciones audiovisuales, el visitante tomará contacto con escenas relacionadas con el sol, el agua, el trabajo del hombre y los viñedos más altos del mundo. En otros espacios se describirán el cielo, el clima y la tierra de Cafayate, mientras que en otra sala se acercará al visitante a los secretos del vino de altura y las variedades emblemáticas de los Valles Calchaquíes, como el torrontés, el cabernet sauvignon, el malbec y el tannat.

Al final del recorrido, la sección El vino cuenta su historia es una propuesta multimedia que sintetiza el proceso de producción del vino.

Ya se prepara también un wine bar con las mejores etiquetas de la región y una tienda de suvenires.

Más allá de esta nueva opción, febrero y marzo son dos buenos meses para regresar a Cafayate. Es tiempo de cosecha y el paisaje se llena de un ir y venir de camiones repletos de uvas de distintos colores, listas para comenzar el proceso de vinificación. Un programa recomendable es recorrer las largas filas de vides para conocer en vivo y directo las variedades de uvas que luego se convertirán en vinos de altura de alta gama.

Marta Salinas

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Museo de la Vid y el Vino: en la calle Perdiguero, a un par de cuadras de la plaza principal, estará abierto de lunes a domingo, de 10 a 20. El precio de la entrada será de $ 30 para el público en general y 10 para los salteños.

La tradicional Serenata a Cafayate comenzó a mediados del siglo pasado como una manifestación local, donde en época de la vendimia se reunían grupos musicales a hacer sonar sus guitarras desgranando zambas. Pasaron muchas décadas desde cuando don Petronio Francisco López preparaba en una olla gigante un locro sabroso a las 4 o 5 de la mañana, que regado con el vino que aportaba Arnaldo Etchart, bodeguero entusiasta de la música y uno de los gestores del encuentro, levantaba los ánimos luego de una larga jornada.

Hoy es un importante encuentro musical dentro del calendario de atracciones salteñas. Durante la semana del 14 al 20 de febrero, en el predio que fue la vieja bodega Coll, bautizada como La Bodega Encantada, es posible oír los mejores conjuntos musicales folklóricos salteños y disfrutar de un colorido espectáculo bajo el límpido cielo estrellado de Cafayate.

Para visitar la zona de Cafayate, una opción es instalarse por unos días entre los mismos viñedos a pleno confort. Ofrecen esta posibilidad lugares como Patios de Cafayate, que junto a la bodega El Esteco se integra a un paisaje de vides con el puro estilo colonial salteño, y el Cafayate Wine Resort, rodeado de bodegas y viñas con su gran piscina casi sobre los cerros.

A unos pocos kilómetros, en Tolombon, está el boutique Altalaluna junto a los que fueron viñedos de Orfila y, en plena quebrada de Las Conchas, La Casa de la Bodega, dentro de un paisaje de imponentes cerros.

Entre otras novedades, el Grupo de Hoteles Grace decidió instalar dentro de La Estancia de Cafayate una propiedad de 500 hectáreas, en pleno corazón del valle. Grace Cafayate Hotel, Spa y Villas Residenciales será un complejo que contará con un edifico principal y 20 villas. El hotel abriría sus puertas en 2012 y en su edificio principal, con biblioteca y gran hogar, contará con piscina y spa con terapias a base de cristales de sal y uvas cosechadas en el lugar.

Si el plan es recorrer bodegas sin por eso perder un día de golf, La Estancia de Cafayate ofrece una espectacular cancha de 18 hoyos, diseñada por el arquitecto norteamericano Bob Cupp.

Con el impagable telón de fondo de los cerros cafayateños, el lugar brinda también este año un programa especial para vivir la vendimia.