La sexóloga responde: el deseo sexual III

Somos sexuales desde el momento en que nacemos, y lo primero que se advierte en el nacimiento es nuestro SEXO GENITAL que determina que seamos ciudadanos hombres ó mujeres. La sexualidad se desarrolla a través de distintas etapas, descriptas por el psicoanálisis, como etapas: oral, anal, y fálica. Según esta teoría el individuo gestiona los estímulos externos del medio a través de las sensaciones de estas zonas receptivas corporales. Según el sexólogo John Money, los humanos formamos lo que el denomina MAPAS DEL AMOR, alrededor de los 3 a 7 años de edad, gestionando todas aquellas experiencias vividas, lo que van a ir configurando nuestra IDENTIDAD SEXUAL.

Esta Identidad va a determinar nuestros gustos y preferencias sexuales así como qué cosas nos estimulan eróticamente, y va a ir configurando quiénes somos sexualmente, a quién elegimos y por qué lo elegimos. Esta etapa infantil de configuración de mapas sexuales, empieza a manifestarse en la adolescencia, con el desarrollo hormonal, y va perfilando nuestras elecciones sexuales.

Si bien el tema es muy amplio y complejo, podría decir como síntesis, que del desarrollo psicosexual y de la configuración de estos mapas va a depender en cierta medida, nuestra elección de género para enamorarnos (Heterosexual, Homosexual, Bisexual ) y las elecciones eróticas que hacemos.

La alteración en el desarrollo de estos Mapas Del Amor va a determinar las PARAFILIAS, antes llamadas perversiones sexuales, que generan que un individuo pueda responder sexualmente, sólo ante un TIPO ESPECÏFICO de estímulo erótico (sadomasoquismo, voyerismo, necrofilia, paidofilia o pedofilia, travestismo, fetichismo, etc) Digamos que un MAPA DEL AMOR "SANO" contiene un poco de cada uno de estos ingredientes parafílicos, que conforman nuestro imaginario erótico y nuestras fantasías sexuales.