Es una de las joyas coloniales de Brasil, un pueblo que permanece casi intacto desde el siglo XVIII, con sus calles empedradas y casas de colores vivos. Enmarcada entre las aguas turquesas de la bahía de Ilha Grande y las cumbres boscosas de la Serra do Mar, Paraty, en el estado de Río de Janeiro, es también un lugar privilegiado por la naturaleza, con más de 300 playas y 50 islas a su alrededor.
Por si faltaran motivos para visitarla, la villa de arquitectura exquisita y paisajes vírgenes es, asimismo, sede de una intensa actividad cultural y recreativa. Uno de los eventos más esperados del año, sin ir más lejos, acaba de arrancar el último viernes, y continuará hasta el próximo 3 de mayo. Se trata del Festival Gastronómico Paraty Delicias del Mar, en el cual los principales chefs tienen vía libre para crear platos especiales a base de pescados y frutos de mar, todo a precios muy tentadores ( www.eco-paraty.com/br/eventos/deliciasdomar.htm ).
Otra actividad que ha hecho de Paraty un nombre en el calendario mundial de eventos es la Feria Literaria Internacional de Paraty (FLIP), que este año se desarrollará del 1° al 5 de julio ( www.flip.org.br/homenagem.php3 ). La feria es una ocasión para reunir a escritores nacionales e internacionales de todos los géneros, para promocionar lanzamientos, divulgar nuevas publicaciones, reeditar grandes éxitos y presentar charlas y debates. Esta séptima edición de la fiesta del libro será un homenaje al escritor pernambucano Manuel Bandeira (1886-1968), cuya obra poética ocupa un lugar indiscutible en la tradición literaria brasileña.
Paraty fue un importante centro comercial durante el siglo XVIII, cuando desde su puerto salían barcos cargados de oro extraído de Minas Gerais, con rumbo a Portugal. Por eso, el lugar se hizo famoso entre los piratas y el puerto se volvió tan peligroso que las autoridades se vieron obligadas a cambiar las rutas.
Fue recién en los años 70, con la inauguración de la ruta Río-Santos, que bordea el litoral de Río de Janeiro y São Paulo, que la belleza de Paraty fue redescubierta, transformándose en un punto turístico de fama internacional.