Anoche, a la madrugada, quise escribir el post de hoy y me pasó lo que nunca. Quedarme dormida con la compu en mi falda. No se imaginan el agite que tuve estos últimos días. Agite en el buen sentido de la palabra.
A eso de las 4 am me desperté y tuve algunos pensamientos raros. Me levanté y me fui a meditar, cosa que tampoco había logrado antes de acostarme.
"Sé tu mejor amiga", me dije. "Sé más reservada, más discreta (con las palabras). Y ante todo, Inés, recuperá un espacio de la más absoluta intimidad CON VOS MISMA. Volvé a los cuadernos, a las caminatas y sabé que no todos tus pensamientos deben ser expresados, no es necesario".
"Y si a veces te ponés demandante o pesada hacia el afuera, es sólo porque por momentos también estás enloquecidamente demandada. Relajate."
Tengo trabajo intenso hoy, algunos abrazos pendientes que olvidé ayer, un adaptador de 2 patitas redondas a 3 que conseguir y quehaceres domésticos. ¡E ir a la plaza!
¿Y uds.? ¿Cuáles son sus pensamientos mínimos de este viernes?
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