Un aeropuerto más eficiente y responsable

Heathrow, en la capital británica, inaugurará dentro de pocos días la nueva Terminal 5, de British Airways, que mejorará el tránsito de pasajeros y el aprovechamiento de la energía

3 de febrero de 2008

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LONDRES.- Tras el final de la Segunda Guerra Mundial, el aeropuerto de Heathrow se convirtió, en 1946, en la más simbólica puerta abierta del Reino Unido, de par en par, al mundo; acaso el gran sentido del tráfico aéreo, que acompañó el gran desarrollo en Europa. El 27 de marzo próximo, en el aeropuerto de Heathrow se establecerá otro hito: la inauguración de la Terminal 5, de British Airways, un nuevo escenario para pasajeros y aviones encaminado a lo más moderno del planeta.

El edificio, que rompe con la tradición de un espacio extendido e incómodo, tomó otra forma: cinco pisos en una superficie muy bien aprovechada; rápido para los pasajeros, con una definición que no tiene nada de caprichosa: espacio, luz y calma, en cada rincón. El costo fue de 4300 millones de libras esterlinas, unos 6200 millones de euros, y el diseño de los ventanales -a cargo del grupo de arquitectura Richard Rogers Partnership- impacta: tienen vistas de las pistas y los aviones; un poquito más allá se advierte el castillo de Windsor y el estadio de Wembley, signos inequívocos de Londres.

El 90 por ciento de los pasajeros de British Airways, unos 30 millones anuales, entrarán y saldrán de Londres por la Terminal 5, que seguirá con el respaldo de la 4.

Notables mejoras en la puntualidad y el despacho de los pasajeros y equipajes no llevarán más de 10 minutos hasta embarcarse en el avión.

Un juego dialéctico del gran espacio disponible lo sintetiza una definición de British Airways: "Es posible instalar 50 canchas de fútbol en los cinco pisos de la Terminal 5".

Es de imaginarse los mejores adelantos tecnológicos en cuanto a los servicios de seguridad y servicios; y entre las apreciaciones llamativas, se reducirá en un 70 por ciento el uso del agua en la Terminal 5: en realidad, se utilizará y procesará agua de lluvia no potable y se evitará el gasto del servicio común.

El 85 por ciento de la calefacción será suministrado por el exceso de calor generado en la central eléctrica de Heathrow, a través de un túnel subterráneo. El medio ambiente no se olvidó: se plantaron 34.000 arbustos. Rodeado de cristales, se aprovechará la luz del día y se evitará el uso de iluminación artificial.

Con una nueva torre de control de tráfico aéreo, tiene disponible un estacionamiento para 4000 vehículos y un hotel de 600 habitaciones conectado a la Terminal 5.

No puede ser mejor el destino de los aviones: 60 lugares para estacionamiento directo con la terminal, 14 de los cuales están preparados para los gigantes Airbuses 380. Los pasajeros redondearán su paso por la Terminal 5 con un recorrido de compras y alguna degustación. Harrods, Tiffany´s y Mulberry; o Zara y Prada; galería de arte, spa y la mejor comida de cualquier rincón del mundo.

Pasaron más de 60 años de aquella reapertura tras la Segunda Guerra Mundial. No se desaprovecharon.

Por Carlos Losauro
Enviado Especial

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