La expresión colgados de una palmera podría tener ahora su versión de alta gama desde la inauguración, el sábado último, de un hotel con habitaciones en los árboles. Descansar a cuatro metros, en el bosque de Harads, Suecia, al sur del Círculo Artico, es una propuesta innovadora y eco friendly , según sus creadores, ya que las cabañas pasan casi inadvertidas: sus paredes externas están completamente espejadas y cada cuarto, denominado Mirrorcube, se mimetiza con el entorno.
Las cabinas del Treehotel ( www.treehotel.se ) son de 4 metros cúbicos y ofrecen una privacidad de alto precio: 555 dólares por noche. Los dueños construyeron sólo cuatro, pero planean otras veinte. Según ellos, la idea fue inspirada en el documental Trädälskaren (amante de los árboles), de Jonas Selberg Augustsen, que presenta a tres hombres en una casa similar, diseñada para demostrar el significado histórico y cultural de los árboles para el ser humano.