Chica de tapa OHLALÁ!: “Necesitaba representar esta dualidad que todos tenemos”
20 de diciembre de 2019
El pelo de Yamila resultó ser el mayor reflejo de su búsqueda personal. Ella cuenta su historia en libertad y con mucha humildad, aunque quizá, nadie la exprese mejor que su pelo.
Hace dos años, Yamila Santillán se rapó y pasó por todos los colores y largos posibles, siempre siguiendo los consejos de su mamá peluquera. "Notaba que me iba a los extremos de todo y entendí que, claramente, nunca voy a ser una cosa o la otra del todo, siempre es un poquito y un poquito", dice Yamila.
Bajo esta convicción, decidió que su corazón y su mente debían ser, en conjunto y en igual medida, sus mejores aliados. Reconoció que no hay voz externa lo suficientemente poderosa como para mitigar nuestros verdaderos y más profundos deseos, al menos no por mucho tiempo. Integrando su diversidad, tan propia y enriquecedora, fue reconstruyendo su camino, abrazando su luz y su oscuridad, y despojándose poco a poco del deber ser.
Cuestionar, cuestionarnos y reinventarnos. Cada vez nos animamos a hacernos más preguntas y a defender nuestras respuestas, que nos invitan, a veces con delicadeza, otras con cierta urgencia, a cambiar y a manifestar ese cambio.
Su pelo transmite su mensaje, y le encanta poder compartirlo al mundo para que cada vez más personas se atrevan a representar su vida a su manera. "Creo que el pelo tiene mucho que ver con lo que nos pasa internamente", afirma Yamila, quien hoy ya piensa en quitar el rubio, que para ella significó desintegración, y dejarlo crecer para unas futuras rastas que representen naturalidad y humanidad.
¿Qué expresás a través del pelo?
"El pelo representa parte de tus pensamientos y el bienestar de uno. Son las ramificaciones de la mente. Si estás bien, el pelo está hermoso, lucido y radiante, pero si estás pasando un mal momento, el pelo suele secarse, se entristece", dice Yamila.
¿Cómo definirías a tu pelo?
"Íntegro, dual y auténtico".
En esta nota: