
Loco todo el asunto de la disciplina.
Cierto que es difícil poner límites.
Ponerlos, y cumplirlos.
Y hay mil formas de aplicar el concepto. Cada quien tendrá la suya.
Como en todo, cada cual, igual de respetable.
SALVO: (y acá viene el cuento)
Cuando Marcos empezó su vida escolar, no lo hizo en la honorable institución a la que concurre hoy en día. No no. Hizo sala de 2 años en otros Saint X que nos quedaba a 2 cuadras.
Una tarde, cuando lo voy a buscar, me quedo hablando con una madre de otra sala, ahí en la puerta.
Me contaba esta mujer que tenía tres hijos (qué horror, pensaba yo, qué cantidad) y que el más grande era "la piel de Judas".
Luego de describirlo, y para ser más explícita, me relata una anécdota que había ocurrido uno de esos días.
Nada, boludeces de los niños. Nada muy terrible.
Pero el cuento terminaba con: "me hizo enojar tanto que le di un bife, lo senté en su cuarto y le dije que no saliera hasta que yo le avisara".
Ahá
6 (seis) años el chiquito.
Y esta se enojó porque era un bardo.
Ahora, yo digo:
A los seis años, alguien puede ser algo más que lo que los padres quisieron?
Es, acaso, una persona de esas edad, culpable de algo?
No es sólo un resultado? Digo, lo que resultó de las decisiones de los padres?
Eso, por un lado.
Luego:
Esta mujer, cuando se enoja con una amiga, le pega?
Cuando pelea con el marido, lo sacude?
Cuando su propia madre le grita, le da un golpe?
Cómo puede ser que adultos, que claramente no resuelven sus frustraciones a los golpes, que no andan ajusticiando a las piñas a otros adultos cuando les generan inconvenientes, sí lo hagan con gente de menos de 25 kilos y que, encima, son sus hijos.
Eh? Cómo puede ser?
Cómo te atrevés a golpear a un chiquito, por más enojada que estés?
Hablo de esta mujer sólo porque me resultó bien gráfico, pero hay muchas que lo hacen.
Cobardes.
SEGUIR LEYENDO


Lanzamos Wellmess, el primer juego de cartas de OHLALÁ!: conocé cómo jugarlo
por Redacción OHLALÁ!

Gala del Met: los 15 looks más impactantes de la historia
por Romina Salusso

Kaizen: el método japonés que te ayuda a conseguir lo que te propongas
por Mariana Copland

Deco: una diseñadora nos cuenta cómo remodeló su casa de Manzanares
por Soledad Avaca Cuenca
