Calendario de adviento: cuánto cuestan y dónde podés conseguirlos en Argentina

Además de su costado estético —porque sí, vienen divinos—, hay algo del ritual que nos atrapa. Abrir una ventanita por día genera esa dosis justa de sorpresa que hace más llevadera la espera navideña. También funciona como un autoregalo: un mimo diario que suma color, texturas, aromas y hasta un mood festivo sin esfuerzo.

Tradicionalmente incluían chocolatitos o pequeños juguetes, pero hoy hay versiones con cremas, sérums, fragancias, esmaltes, accesorios y mini make up. Para quienes quieren armar uno casero, las posibilidades son infinitas: mensajes motivadores, actividades para hacer en familia, caramelos, frases de amor o pequeños regalos personalizados. Es una forma simple de transmitir valores y crear un ritual compartido.

 

Lo mejor: ya no hay que viajar para conseguirlos. Cada año más marcas los suman a sus colecciones navideñas y hoy existe una opción para cada presupuesto y estilo. Desde cofres con skincare para fanáticas del glow, hasta versiones de maquillaje o accesorios beauty que permiten descubrir productos sin invertir en el tamaño full size.