Uñas con brillo: 7 diseños elegantes perfectos para hacerte en diciembre

Olvidate del esmalte que se descascara al segundo día: el Dip Powder llegó para quedarse. Durabilidad, brillo y creatividad se combinan en una manicura que refuerza la uña natural y permite diseños infinitos.

La manicura dejó de ser solo un accesorio. El Dip Powder se convirtió en la técnica favorita para quienes quieren uñas impecables, duraderas y llenas de estilo. A diferencia del esmalte tradicional, este sistema refuerza la uña natural mientras permite jugar con una amplia gama de colores y efectos, manteniendo los resultados por semanas.

Lo que hace única a esta técnica es su combinación de resistencia y versatilidad. Desde tonos clásicos hasta colores vibrantes y efectos especiales como glitter, degradé o acabado mate, el Dip Powder abre un universo creativo sin dañar la uña. Además, no requiere lámpara UV y es mucho menos invasivo que el gel o el acrílico, cuidando la salud de las manos a largo plazo.

El procedimiento es simple y rápido:

1. Preparación de la uña natural (limado y limpieza suave).

2. Aplicación de un adhesivo especial.

3. Inmersión de la uña en el polvo de color.

4. Repetición del proceso hasta lograr la cobertura deseada.

5. Sellado final para aportar brillo y fijación.

Para mantenerlas perfectas, se recomienda hidratar cutículas a diario, evitar productos abrasivos y retirar el Dip Powder siempre con profesionales para proteger la uña natural.