Astrología dracónica: qué es y cómo se complementa con la carta natal

Así como la carta natal se calcula de acuerdo al momento en que llegamos al mundo, la carta dracónica, o carta del alma, se calcula a partir de los Nodos Lunares. Y, como sabemos que todo lo que se refiere a la Luna habla de lo inconsciente, el resultado es un mapa celeste alternativo, tan válido como el natal, que revela la naturaleza más velada de nuestra personalidad y nuestra historia.

Se puede hacer fácilmente en las apps Aquarius To Go, Planet Dance y en carta-natal.es. Vamos a notar que, donde está el Nodo Norte en la carta natal, está el comienzo de la rueda zodiacal dracónica.

De esta manera, la ubicación de los planetas no varía, pero varían los signos y los comienzos de casas. Es interesante, primero, mirarla de manera aislada para después poder compararla con la natal y ver cómo se complementan.

Abordemos esta carta teniendo en cuenta que nos revela una veta inconsciente de nuestra personalidad y de nuestra vida. ¿Cuál es nuestro Sol dracónico? ¿Y nuestra Luna y Ascendente? ¿Cambiaron los signos de los otros planetas? ¿Dónde están Mercurio, Venus, Marte? ¿Los comienzos de las casas? ¿Hay elementos (aire, agua, fuego, tierra) que preponderen o escaseen? ¿Y las modalidades (cardinal, fijo, mutable)?

Una vez que tenemos una noción de la carta dracónica en sí, podemos compararla con la natal (la carta trópica) y preguntarnos en qué casa trópica caen los planetas dracónicos (y viceversa). 

Si una casa trópica y una dracónica están a tres grados o menos de diferencia, se dice que se superponen. Por ejemplo, imaginemos que tenemos una casa 5 dracónica a 02° de Géminis y una casa 10 trópica a 04° 50’ de Géminis: podemos pensar en un rico potencial artístico que nos lleva a la notoriedad. 

Por último, ¿cómo se compensan las dos cartas? ¿Equilibra una carencias de la otra? ¿Cómo? Para eso, miremos de nuevo los balances energéticos de los elementos y las modalidades. Y, si nos animamos, podemos buscar figuras que se cierren al combinar los dos mapas, o conjunciones y otros contactos entre planetas y casas de uno y el otro. Es una aventura de autoconocimiento en la que podemos pasar horas deslumbrándonos con revelaciones y conexiones que no habíamos imaginado.