Venus en Cáncer: qué deberías saber sobre este nuevo tránsito

La manera armónica de vivir este tránsito es en plena conexión con nuestro mundo emocional. Darle al disfrute una dimensión más profunda a partir de nuestros sentimientos lo convierte en algo significativo, personal y propio. Es un gran momento para abrirnos a la intimidad vincular y sexual y compartir, además de las experiencias, la ternura y la calidez de las que somos capaces.

 

Los riesgos de una manifestación inarmónica de Venus en Cáncer tienen que ver con la inmadurez, el miedo y la dependencia emocional. También, con vivir con desconfianza y pesimismo las relaciones, y con abordar el placer con culpa o manipulación.

Esta energía les resulta más natural a los signos de agua: al propio Cáncer, Escorpio y Piscis, como también a los que están en sextil: Tauro y Virgo. Disfrutarán de un período de confort, a tono con su manera habitual de sentir y expresarse, y pueden llegar a abrir una nueva etapa en relaciones existentes o concretar el comienzo de un nuevo romance, amistad o vínculo importante.

Quienes se sienten menos a gusto con el estilo canceriano son los otros signos cardinales: Aries, Libra y Capricornio, a quienes la sensibilidad de este signo les choca. El desafío tiene que ver con dos cuestiones: primero, habilitarnos a conectarnos con nuestro mundo afectivo desde un lugar que no acostumbramos (y que puede hacernos sentir inseguras y expuestas) para en un segundo momento poner al servicio de nuestros vínculos (y de nuestra relación con nosotras mismas) aquello de nosotras que aflore de esta interesante exploración. 

Géminis, Leo, Sagitario y Acuario sentirán la impronta canceriana en el ambiente, pero con un impacto menor en sus vidas. Pueden aprovecharla para explorar su creatividad y la profundidad de sus emociones sin miedo.

Es también una temporada súper importante para los Ascendentes Cáncer y Capricornio, que podrán trabajar en su amor propio y en su relación de pareja desde un lugar muy comprometido emocionalmente.

Su tránsito va a ser directo a lo largo de todo este período. Es decir, no retrogradará ni se detendrá en ningún momento.

Mientras ingresa en Cáncer, el 7 de mayo, Venus todavía va a estar en contacto inarmónico con Neptuno y armónico con Júpiter: la idea que propone es que no nos alimentemos de falsas ilusiones y mantengamos una mirada muy realista sobre las cosas como son si queremos crecer en cuestiones vinculares, económicas y de bienestar.

Entrando en la segunda semana de este tránsito, un contacto armónico de Venus con el Nodo Norte y con Saturno nos dirige y nos brinda la capacidad de enfocarnos, de saber hacia dónde vamos y de trabajar en la estructura y los sanos límites que necesitamos para llegar adonde nos proponemos.

La tercera semana nos pone en contacto con viejas heridas y dolores que nos condicionan para amar en plenitud y para disfrutar de lo bueno y bello que tiene la vida. Es una ocasión ideal para tratar estos temas en terapia y empezar un camino de aprendizaje y alivio, con un enfoque novedoso en el que podamos incorporar el desapego como herramienta para las situaciones que lo merecen: Venus hará cuadratura con Quirón y sextil con Urano. Pueden aparecer, también, sorpresas agradables o incursiones novedosas en temas económicos, de amor, pareja y placer. Venus termina su tránsito por Cáncer y pasa a Leo el 5 de junio.