Venus en Géminis: cómo sobrevivir a este momento de dualidad e indecisión

La manera armónica de vivir este tránsito es a través del intercambio honesto y estimulante de puntos de vista. También es el mejor momento del año para cuestiones comerciales, acuerdos, contratos, estudios, trabajo intelectual y cuestiones en las que se requiere una mente minuciosa (especialmente antes del 21 de abril, cuando Mercurio, regente de Géminis, empiece a retrogradar).

Esta energía les resulta más natural a los signos de aire: el propio Géminis, Acuario y Libra, como también a los que están en sextil: Aries y Leo. También Virgo, por ser el otro signo regido por Mercurio, es afín. Disfrutarán de un período de confort, a tono con su manera habitual de sentir y expresarse.

Quienes se sienten menos a gusto con el estilo geminiano son los otros signos mutables: Sagitario y Piscis, a quienes la volatilidad de este signo les choca. El desafío tiene que ver con dos cuestiones: primero, habilitarnos a conectarnos con nuestro mundo afectivo desde un lugar que no acostumbramos, y que puede hacernos sentir inseguras y expuestas, para en un segundo momento poner al servicio de nuestros vínculos (y de nuestra relación con nosotras mismas) aquello de nosotras que aflore de esta interesante exploración. 

Tauro, Cáncer, Escorpio y Capricornio sentirán la impronta ariana en el ambiente, pero con un impacto menor en sus vidas.

Su ingreso en Géminis se da de la mano de Plutón, que lo envalentona y empodera. Más tarde en su primera semana, Saturno le recuerda que todo tiene un límite y que hay que hacernos responsables de nuestras palabras.

El 21 de abril, Mercurio (planeta que rige este signo) entra en retrogradación y ralentiza un poco las cosas. Todo lo que se pacte durante la temporada retro puede estar sujeto a revisiones y confirmaciones posteriores. Durante la misma semana, tendremos la ocasión de revisar si estamos en sintonía con nuestro deseo visceral y rebelde (Lilith) y podremos trabajar en el alivio de viejas heridas (Quirón). La temporada de Mercurio retrógrado durará hasta el 15 de mayo, cuando Venus ya se encuentre en Cáncer, su próxima parada.

En su última semana en Géminis, Venus desafiará nuestra capacidad de dilucidar fantasía y realidad (en una cuadratura a Neptuno) y nos ofrecerá la chance de aprender y expandirnos gracias a Júpiter. Es un momento para estar muy atentas, chequear todo varias veces y creer en lo que vemos y no en lo que escuchamos: entre la retrogradación de Mercurio y la cuadratura con Neptuno, el comienzo de mayo puede traer mentiras, estafas, engaños y confusiones.

 

El 7 de mayo Venus cambiará de signo y pasará a las aguas cancerianas.