Alerta tendencia: así podés armar outfits súper originales con un accesorio que seguro tenés en casa

La tendencia actual se inspira en estéticas pasadas: desde el boho chic de los años 70, pasando por los pañuelos anudados a los jeans en los 90, hasta llegar a la fiebre de los 2000 donde todo accesorio tenía su lugar en la cintura. Hoy, ese gesto vuelve cargado de una nueva intención: menos nostalgia literal, más reinterpretación contemporánea.

Lo interesante es cómo este recurso permite jugar con el estilo sin necesidad de sumar demasiadas prendas. En un outfit monocromático, un pañuelo con estampado floral o geométrico aporta el toque justo de color y textura. Y si el look ya es audaz, un pañuelo en tono neutro puede sumarle estructura visual sin recargar.

El truco está en el gesto: atarlo con naturalidad, sin rigidez, dejando que el pañuelo cuelgue ligeramente en la cadera. Puede anudarse al centro o de forma asimétrica, con un nudo pequeño o con la punta suelta. Cada estilo comunica algo distinto: desde una vibra relajada y veraniega hasta un toque elegante y sofisticado, según el material y el estampado elegido.

Las versiones de seda aportan un aire más refinado, mientras que los de lino o algodón tienen ese espíritu casual ideal para los días cálidos. También es una excelente alternativa para quienes buscan marcar la cintura sin recurrir a cinturones estructurados.

Parte del encanto de esta microtendencia está en su versatilidad. Un solo pañuelo puede usarse de muchas formas: en la cintura, en la cabeza, al cuello o atado a la cartera. Es una solución perfecta para quienes eligen armar un guardarropa más consciente, donde cada ítem tiene múltiples usos y puede adaptarse a diferentes estilos.

Además, funciona en todo tipo de cuerpos y no requiere una silueta específica para lucir bien. Más que marcar, el pañuelo insinúa, enmarca y aporta movimiento.

Este gesto simple encarna ese concepto tan deseado en la moda actual: el “effortless chic”, esa elegancia sin esfuerzo que parece casi casual. Es una forma de renovar prendas básicas, de actualizar el look sin compras nuevas y de apropiarse de una tendencia con sello propio.

Así como el pareo abandonó la playa para colarse en el día a día urbano, el pañuelo en la cintura llega para recordarnos que a veces, lo más simple puede ser también lo más poderoso. Y que el estilo está, muchas veces, en los detalles.