Moda años 90: los looks que vuelven con todo de la mano de Lindsay Lohan, Dua Lipa y Kylie Jenner

Después de años alejada del centro de la escena, Lindsay Lohan volvió con fuerza. Y no solo al cine, sino también al universo de la moda. Su reaparición en Nueva York, durante la promoción de la secuela de Freaky Friday, fue un guiño directo a sus inicios: eligió un conjunto de tweed amarillo y negro que nos llevó de inmediato a su personaje en Juego de Gemelas, y también al icónico look de Cher Horowitz en Clueless.

Con el cabello lacio, ondas suaves en las puntas y un makeup natural, Lohan recupera ese estilo preppy y sofisticado que definió a toda una generación. Su elección del tono “butter yellow” –uno de los favoritos del lujo silencioso– suma delicadeza y tendencia a partes iguales. ¿El mensaje? Hay modas que nunca pasan, solo esperan el momento justo para volver a sacarlas del armario. 

Dua Lipa es, sin dudas, una de las figuras que mejor sabe cómo jugar con la moda. En cada videoclip, red carpet o salida casual, la artista rescata la esencia más lúdica y divertida de los 90. Su estilo combina pantalones de tiro bajo, tops ajustados, vestidos lenceros y conjuntos de denim que remiten a la cultura club kid, al pop alternativo y a la moda rebelde de esa época.

Pero no todo queda en la ropa: chokers, lentes ovalados de colores y peinados con raya al medio completan su fórmula ganadora. En maquillaje, apuesta por tonos marrones, metálicos y un glow que grita Y2K. Dua entiende que los 90 no son solo una estética: son una actitud.

En su feed, en sus campañas o caminando por la calle, Kylie Jenner reinterpreta los 90 con una impronta muy actual. Su sello: el mix entre el minimalismo de la época –inspirado en Calvin Klein y Jil Sander– y una estética urbana de alto impacto. Los conjuntos de saco y pollera, los pantalones cargo, los bucket hats y los tops diminutos son parte de su uniforme diario.

Kylie suma también accesorios que marcaron la infancia de muchas: scrunchies, minibags y anteojos micro. Todo potenciado por peinados con efecto mojado o raya zigzag, y una paleta de colores que va del neutro más elegante al neón más vibrante. Su estilo es la prueba de que lo simple también puede ser icónico.

Olivia Rodrigo canaliza la esencia más alternativa de los 90. Su estética, marcada por la influencia del grunge y el movimiento riot grrrl, mezcla camisetas de bandas, jeans amplios, botas con plataformas, faldas escocesas y camperas de mezclilla.

Su estilo beauty también acompaña: delineados oscuros, labios en tonos ciruela, maquillaje minimalista y accesorios como pinzas de colores o cadenas. Olivia demuestra que lo rebelde, lo auténtico y lo emocional sigue teniendo un espacio en la moda, y que ser fiel a una estética también es una forma de expresión.

Minimalista, urbana y siempre impecable, Hailey Bieber logró hacer de los básicos noventeros su sello personal. En su guardarropa abundan los trajes oversize, los pantalones de tiro bajo, las musculosas y los crop tops. Sus looks urbanos tienen la dosis justa de sofisticación y confort, y están atravesados por detalles que marcan la diferencia: diademas anchas, anteojos retro y zapatillas chunky.

En maquillaje, Hailey prioriza la piel luminosa, los labios nude y las cejas peinadas, un combo que remite al ideal de belleza natural que tantas supermodelos –de Cindy Crawford a Kate Moss– supieron representar. Es la prueba de que, a veces, menos es más… y que el pasado puede ser una guía, no una repetición.

El boom noventero no es casual. Es una respuesta estética, cultural y emocional a tiempos que –al menos en el imaginario– parecían más simples. Estas son las 4 grandes tendencias que están marcando el rumbo de la moda hoy:

• Minimalismo: cortes rectos, líneas puras y una estética clean que grita elegancia sin esfuerzo.

• Tweed a cuadros: el tejido favorito del estilo preppy volvió recargado, colorido y con mucho potencial para combinar.

• Total denim: un clásico street que se aggiorna con nuevos cortes y accesorios.

• Minifaldas: de tiro alto y silueta recta, hoy se usan con texturas nuevas y colores neutros o llamativos.