Pussy Bow, la blusa con lazo que Lady Li adoraba vuelve a la moda

A mitad camino entre lo clásico y lo vanguardista, este guiño al estilo “lady-chic” llega con fuerza, pero sin complicaciones. Ideal para combinar con pantalones tailleur, faldas midi o incluso denim lavado claro, aporta ese toque inmediato de elegancia que transforma lo cotidiano en especial. Además, este tipo de diseños:

• Aporta feminidad sin necesidad de ser recargada: el lazo suaviza la silueta y añade un aire delicado pero con carácter.

• Es versátil: funciona igual de bien para la oficina que para una salida nocturna; solo cambia los accesorios y cambias la narrativa.

• Es tendencia auténtica: el lazo, símbolo de refinamiento y lujo, está siendo reinterpretado por las firmas y el street style como un detalle esencial para la temporada. 

• Permite jugar: ya sea un lazo XL, algo discreto al cuello o lateral, o bien una blusa de satén que lo remarca. Las texturas importan y el lazo aparece en seda, gasa, satén.

Elige una blusa con lazo que tenga buen tejido (seda ligera o gasa estructural), evita que el lazo sea tan largo que opaque toda la pieza.  Y si ya tenés un lazo llamativo, optá por el resto del outfit más sobrio.

-Con pantalón sastre en tono neutro + tacón medio = modernidad con sello clásico.

-Con falda lápiz,  blazer oversize para un stilismo ejecutivo que no pasa desapercibido.

-Con jean recto ,  zapatos masculinos para un contraste entre lo romántico del lazo y lo urbano del denim.

-Con accesorios delicados para no quitar protagonismo al juego del lazo.