Tatuajes: qué cuidados hay que tener durante el verano

Existe la idea de que no es seguro tatuarse en verano. Bueno, esto no es del todo cierto. Claro que podés adornar tu piel en cualquier estación, lo que pasa es que no es lo más recomendable. Hay muchas razones para esto, la primera es que la cicatrización se ve más favorecida durante los meses fríos. Por el contrario, el clima cálido hace que transpiremos más y esa humedad puede alterar el tiempo de curación. A esto se le suma que en el verano la radiación UV del sol es más potente, cosa bastante dañina para los tatuajes y para la piel en general. 

Si aún así estás convencida de que querés pasar por las agujas en esta estación, hay un par de medidas que tenés que seguir para que tu tatuaje sane bien. Lo más importante de todo es que la zona esté limpia y seca para evitar infecciones. Por este motivo deberías evitar bañarte con agua muy caliente, o entrar a saunas y jacuzzis. Meterse al mar o una pileta tampoco es recomendado ya que uno tiene un alto nivel de salitre y el otro de cloro, ambos componentes son super irritantes para la piel.

Una precaución fundamental es usar siempre protector solar +50. Algo a tener en cuenta es que no todos los colores de tintas tienen los mismos componentes. El magenta y el amarillo son los que más reacciones adversas provocan en la piel, por lo cual es recomendable que esten tapados así se evita la exposición al sol. En lo posible usa prendas de algodón en vez de telas sintéticas, de esa forma la piel está mejor ventilada y no se crea un microclima húmedo sobre el tatuaje. Finalmente, no te olvides de hidratar la zona con una crema reparadora que no tenga color ni perfume. 

Si bien el tiempo de cicatrización difiere de persona en persona según las características propias de la piel de cada uno, se recomienda que mantengas estas medidas durante al menos un mes. No olvidemos que un tatuaje es una herida y hay que cuidarla como tal.

Si te hiciste un tatuaje hace tiempo y ya cicatrizó podés meterte al mar o a la pile sin problemas, pero es importante que te sigas cuidando del sol. Para mantener la durabilidad de la forma y el color es importante que te protejas de los rayos UV.  El protector solar es tu mejor aliado, aplicalo siempre 30 minutos antes de salir y retocalo cada dos horas. En lo posible evita estar al rayo del sol entre las 10 a 16 hs porque en este lapso es cuando hay mayor radiación. ¡No te olvides de hidratar la zona con una crema! Tené en cuenta que estas prácticas, además de preservar tu tatuaje, son fundamentales para tu bienestar. La piel, además de ser nuestro órgano más extenso, regula nuestro medio interno, por eso es clave mantenerla saludable.