La Luna nueva está en Libra y así afectará a cada uno de los signos
Esta nueva conjunción entre el Sol y la Luna llega para ayudarnos a revisar nuestra vida afectiva y vincular. La yapa: llega de la mano de un eclipse solar anular. Enterate de todo en esta nota.
14 de octubre de 2023
El impacto de la Luna nueva en Libra. - Créditos: Canva
Aries es el segundo signo de aire, el que simbólicamente equilibra la información que adquirió de manera un tanto caótica Géminis, que fue el primero. También le toca armonizar y acicalar el trabajo de organización y orden que hizo Virgo en la temporada anterior. Como todos los signos de aire, nos invita a reflexionar sobre la manera en que nos relacionamos con el mundo que nos rodea y, particularmente, con los otros, porque Venus es el planeta del amor y los afectos.
Llega el momento de embellecer espacios y embellecernos a nosotras mismas, de trabajar en nuestra autovaloración, de pacificar, de conciliar y de vincularnos desde la diplomacia y el respeto. También es una energía muy dada al arte gracias a su impecable gusto. Es un signo fuertemente ligado a la escucha, que a veces constituye un arma de doble filo porque, en su afán por ser imparcial y no cometer injusticias o errores, Libra puede quedar atrapado en la eterna duda.
Sol y Luna, un encuentro
Periódicamente, el Sol y la Luna se encuentran en el mismo grado de un signo. Esta lunación mensual es la Luna Nueva y, simbólicamente, combina la llegada de un mensaje de nuestro inconsciente (personal y colectivo), representado por la Luna, que es necesario integrar a la parte consciente y voluntaria: la energía del Sol. Son momentos en los que, si estamos atentas, le podemos dar una vuelta de tuerca más a nuestro autoconocimiento.
Esta Luna Nueva se da en el grado 21° de Libra. El momento de mayor cercanía entre las dos luminarias será a las 14:55 hora Argentina del sábado 14 de octubre, y marcará un eclipse. ¿Por qué? Porque sucede muy cerca del Nodo Lunar Sur.
Este eclipse nos habla de dejar atrás ciertas cosas relacionadas con la temática Libra (relaciones, modos de considerar al otro, abordajes de nuestra vida afectiva y vincular, concepciones sobre el amor, por ejemplo). Pero también trae la energía de la Luna Nueva, que habla de inicios, y tiene a Marte como participante: otro indicador de acción y comienzos. También influyen en este eclipse las energías de Mercurio, planeta de la comunicación y el pensamiento, y de Quirón, asteroide que nos habla de esa herida que nos marca profundamente.
En conclusión, podemos verlo como la oportunidad de sanar cuestiones arraigadas que influyen en nuestra concepción del amor, y también de mejorar nuestra comunicación en las relaciones para poder armonizar esa balanza y que no incline la importancia hacia uno de los dos en desmedro del otro. Se viene una etapa de seis meses para trabajarlo.
Dibujos en el cielo
En este evento hay muchos invitados. Además de los ya mencionados en el apartado anterior, Lilith y Venus (significadores de energía de deseo: uno más desencadenado y el otro más atado a los parámetros sociales) y Saturno (el de las reglas y la estructura) le ponen sus condimentos formando una Media Cometa con el punto de encuentro del Sol y la Luna. Esta figura trae armonía a lo que en principio es una oposición: la que protagonizan Venus y Lilith en Virgo con Saturno en Piscis.
Es para notar que Venus es el planeta regente de este eclipse (porque rige a Libra) y Saturno, el planeta que se exalta en la energía libriana. Es como si dos ayudantes le dieran la mano a este proceso que está naciendo: Venus, que es el considerado benéfico y Saturno, que le ofrece su madurez, experiencia y solidez. Lilith, en tanto, nos recuerda la importancia de nuestro deseo más crudo y visceral. La otra figura ya la conocemos: estuvo presente en la Luna Nueva en Virgo e involucró a los transpersonales: Urano, Neptuno y Plutón, en armonía.
Cómo repercute en nuestras energías
En todas las personas, la energía de la Luna Nueva se suele sentir intensamente. Es un momento de introspección, en el que podemos sentir una alineación entre aquello que elegimos expresar de nuestra identidad y nuestras necesidades más profundas. Se trata de una instancia excelente para plantearnos con qué nos identificamos, qué queremos de nosotras mismas y de nuestros vínculos y qué necesitamos profundamente para satisfacer nuestro bienestar emocional.
También, recordemos que más allá de la preponderancia de nuestra energía de Sol, Luna y Ascendente, los doce signos viven en mayor o menor proporción en cada una de nosotras, por lo que todos los eventos planetarios nos repercuten en alguna medida.
Si tenés a mano tu carta natal, podés sacarle más provecho a esta información buscando en qué casa se localiza el grado 21° de Libra, y si tenés planetas o comienzos de casas entre los grados 17° y 25°.
Puntualmente, este eclipse es particularmente importante para las librianas de Sol, Luna o Ascendente, que son las protagonistas del evento y que pueden sentir una invitación a replegarse y estar en soledad. Es una excelente oportunidad para reconocer qué objetivos quieren plantearse para los próximos seis meses y cómo pueden hacer para verlos crecer.
Otros signos beneficiados directamente son Géminis y Acuario, los de aire. Van a tener un momento de claridad, y será importante que respeten su necesidad de mirar hacia dentro, meditar, aislarse de las energías externas por un ratito y conectarse con sus necesidades genuinas.
Leo y Sagitario, como signos de fuego que hacen contactos fluidos con Libra, se ven movilizados emocionalmente, lo mismo que Aries, su opuesto complementario, que probablemente pueda plantearse nuevos rumbos después de lo que dejó atrás con su Luna Llena, del 29 de septiembre en adelante.
Tauro y Escorpio pueden sentirlo como un cimbronazo o llamado al cambio desde el trabajo artístico o de la vida vincular. Les espera un momento más protagónico con el próximo eclipse, el día 28.
Cáncer y Capricornio, finalmente, van a sentir un tironcito que puede ser revelador pero doloroso. Deben prestar atención a la casa en que sucede para entender en qué área de vida va a reflejarse.