Anne Hathaway revive un clásico de Valentino y reafirma la tendencia del upcycling

Las celebridades y sus estilistas se lanzan a la caza de estos tesoros vintage, conscientes de que un look con historia puede generar tanto ruido como el estreno de una colección recién salida de la pasarela. Kim Kardashian lo demostró en la Gala Met al revivir el legendario vestido de Marilyn Monroe, y Emma Stone siguió el camino al lucir un diseño de Gwyneth Paltrow en Grandes esperanzas. Pero hay quienes prefieren un rescate más sutil, casi académico, de piezas que solo las expertas en moda reconocen de inmediato.

Eso mismo hizo Erin Walsh, la estilista de Anne Hathaway, al pensar el look de la actriz para los WWD Honors donde la protagonista de El diablo viste a la moda fue la encargada de entregar el premio John B. Fairchild a Valentino Garavani y Giancarlo Giammetti, en reconocimiento a sus 65 años de trayectoria. La elección fue tan elegante como simbólica: un vestido rojo de los primeros dos mil, extraído del archivo de Valentino, que conjugaba la tendencia actual con un homenaje directo a la casa italiana.

El “rojo Valentino” ese tono inconfundible que compite en leyenda con el rojo Louboutin o el Ferrari fue la pieza central del homenaje. “Creo que este vestido desfiló en 2005, el mismo año en que conocí a Valentino y Giancarlo”, recordó Hathaway. En aquel entonces, la actriz filmaba El diablo viste a la moda, la película que la consagró y la acercó definitivamente al universo de las grandes firmas. Aunque el diseño finalmente resultó pertenecer a la colección otoño-invierno 2003/2004, la coincidencia poco importó: la conexión entre Hathaway y la casa italiana es innegable. El modelo, originalmente lucido por Karolina Kurkova en París, es un vestido de tirantes finos con falda plisada en tres niveles y lazos delicados.

Fiel al espíritu del look original, Anne Hathaway acompañó el vestido con labios rojos, manicura a tono y un peinado con volumen en la parte frontal, de inspiración bouffant. ¿El resultado? Un estilismo con mucho glamour en donde el rojo se vio tanto en maquillaje y outfit.