
Confieso que ayer no me anduve sintiendo muy "pum para arriba", pero que aún así, mucha de esa incomodidad emocional que sintiera me "tiró letra", se tornó productiva. Confieso que terminé la jornada con una convicción nueva: que con los golpes y desperfectos de la psique sucede algo similar a lo que ocurre con los desajustes de la casa y del cuerpo. Que si una no mete mano y "repara" o pide asistencia, a la larga, sin darse cuenta, termina creando hábitos emocionales retorcidos, limitantes y poco "reales" (o sea, termina re-sentida).
Confieso que fuera de estos asuntos intangibles y "gruesos", también anduve ocupándome por entrenar la parte trasera de mi cuerpo. Que los 4 años de maternidad que ya llevo hicieron que la desatienda, y que ahora, después de un tiempo mirándome al espejo -de nuevo-, no digo que me brotó el fanatismo por ser una muñeca, pero sí las ganas de verme con más... tonicidad, ¡firmeza!
Confieso que en el finde me ví en 2 o 3 oportunidades amenazando a mi hija menor con Papá Noel, así como leen. Es que hay momentos en los que su berrinche se pone tan jodidamente intransigente, tan frenético, que no sé qué conejo sacar de la galera para que ella afloje y ceda, ¡y se deje de jod...! Que, además, la muy pilla ha resultado ser la más piojosa de mis hijas. Que a 3 semanas de haberla limpiado, los bichitos y liendres volvieron a prender... y no sé imaginan cómo, ¡de qué manera!
Confieso que el post del viernes no me había gustado por sentirlo desordenado (sí la novela de Violeta y sus comentarios), pero bueno, probablemente también esté necesitando fortalecer mi punto de vista… y abrazarme fuerte a la parte sabia que me guía (dejarme de jod... yo misma).
Por último, para las que preguntaban, confieso que el guión de la película se titula Gina Bruni (el arte del ridículo) y cuenta la historia entre una adolescente de 13, con pánico al agua, y su profesor de natación... a lo largo de una jornada. Y la foto que hoy subo es parte de un trabajo/producción que dirigiera hace 2 años casi, con Ailín Salas (como actriz) y Verónica Noonan en la fotografía.
¡¿Ustedes qué confiesan?!
PD: Gracias, Cus/Lau, voy a estar eternamente agradecida por este recurso que alguna vez nos trajeras.
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