
Se engancharon ayer, ¿viste qué bueno? Sabías que iba a gustarles el tema, lástima que no pudiste estar más presente o activa, pero bueno, todo no se puede. Son días de mucha demanda de parte de tus nenas y hay que sostener el edificio sin muchas exigencias.
Vas pudiendo. Sí, vas pudiendo, Inés. Aunque te trabes, aunque el pecho te apriete por momentos, aunque te sientas cansada, aunque des mil vueltas con pavadas.
Hay épocas que son más complejas, no sólo o no necesariamente por las dificultades objetivas que se presentan, sino porque internamente estás más... más...
Hacé borrón y cuenta nueva. Proponételo. No se trata de reinventarte a lo grande, sino sólo de limpiarte... de decretar que hoy termina un ciclo y empieza otro más acorde a tus necesidades.
Volvé a olvidarte de los otros hoy, de sus expectativas, de tus propios mandatos internos...
¡Y descansá mejor! ¡Priorizate! ¡Andá despacio! ¡Respetate vos! Eso, no pierdas el buen trato con vos. Y que todo aquel que quiera tocar tu puerta lo hago con AMOR. Vos ponés las reglas. Vos ponés las reglas, por eso debés CUMPLIRLAS al pie de la letra.
Hoy necesitaba hablarme a mí misma, chicos. Necesitaba decirme algunas cositas. Necesitaba hacerlo, casi como un diario secreto.
Ya sé que es medio mersa la consigna, ya sé que la hicimos, pero en este día LICENCIA los invito a que se digan, se repitan, se griten, se recuerden... todo aquello que sí nos entra por los oídos, pero a veces se nos olvida.
PD: ¡Ah, me retracto por lo que dije de Catherine!
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