Supongamos que se le ocurre teñirse el pelo de ciruela, totalmente convencida que es re "in" en el verano de Timor Oriental, y que va a ser el centro de los halagos en la próxima reunión de amigas. O que se le ocurre comprarse un juego de palos de golf, sabiendo muy bien que los únicos deportes que se le han visto practicar son el zapping y el drinking.
Pero un@ l@ ve tan content@, como un infante con juguete nuevo, que le da como un poco de cosita intentar siquiera objetar su nuevo look o su nuevo pasatiempo.
No sé si el joven Cool anda por ahí (la verdad anduve medio perdido esta semana, y posiblemente lo esté en los próximos días), pero de paso les pregunto a ustedes, mis queridos amigos:
Cuál fue la novedad más extraña con la que les vinieron sus parejas (actuales o pasadas) con la que tuvieron que lidiar sin poder pincharles el globo?
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