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Extremos en la montaña

Con opciones para todos los niveles, los esquiadores avanzados tienen privilegio




VALLE NEVADO.- Una toma aérea se asemeja mucho al dibujo de un nene. Las líneas que se cruzan infinitamente cambian el paisaje y crean una vista sorprendente. Así se ve Valle Nevado, en lo más alto de las montañas y a menos de dos horas de Santiago. Es uno de los centros de esquí más modernos de América del Sur, donde los snowboardistas no sólo abundan, sino que además son bien recibidos.
Cuando todo es blanco y parece no haber nada por encima, recién allí aparece el pomposo y moderno ski resort, cuyo edificio remodelador se descubre a medida que uno asciende por las laderas, hasta más de 3000 metros de altura, donde se encuentra el complejo.
La opción de Valle Nevado, una de las más populares y a la vez de las más codiciadas entre los chilenos, funciona a su vez como escape de miles de personas que quieren salir de la capital en busca de descanso. "Esto es un paraíso", cuenta exaltado Andrés, un chileno de 24 años que llegó para pasar el día con un grupo de tres amigos.
El centro permite esquiar a 3670 metros sobre el nivel del mar, en la Cima Tres Puntas, lo que habilita a desandar desde allí los 810 metros de desnivel de sus pistas, las que se extienden a lo largo de casi 40 interminables kilómetros.
Para los visitantes, en su mayoría brasileños, las pistas son muy variadas. Si bien falta algo de nieve en el inicio de la temporada, no hay de qué preocuparse; nada que los cañones que se encargan de fabricarla no puedan solucionar. Incluso, ya se puede llegar hasta el centro de La Parva esquiando.
Para este año, la organización decidió sumar dos andariveles, que permitieron la creación de cinco nuevas pistas para niveles medio y avanzado. Todo eso sumado a la ostentación que hay en este sitio, en el que es común ver a personajes de la farándula local e internacional, como figuras de la talla de Peter Gabriel y Keanu Reeves, que pasaron recientemente.
Teniendo como telón de fondo al megaproyecto inmobiliario que pretende, hacia 2020, convertir este centro en el primer pueblo de montaña de la región, Valle Nevado ofrece para los huéspedes tres opciones de alojamiento. Además, existen siete opciones para comer, entre restaurantes y paradores, y cuatro bares para disfrutar de un rato de quietud. También hay buenas noticias para los compradores compulsivos: podrán recorrer el centro comercial que se ubica en lo alto de la montaña.

Heliski, para audaces

Los descensos fuera de pista son tesoros invaluables para los esquiadores experimentados. En Valle Nevado se puede llevar el nivel de adrenalina al máximo, desandando laderas de nieve virgen entre las nubes. Esto es a más de 4000 metros de altura, en el cerro Bismark. Se puede acceder con un corto viaje en helicóptero que conduce a destinos impensados. "Pero no es para cualquiera", aclara José Luis Varela, jefe de Marketing del centro de esquí.
Heliski es una de las disciplinas más buscadas por los expertos y la encargada de concretar los sueños de cualquier esquiador muy avanzado, permitiendo a los más intrépidos acceder a lugares inaccesibles de la montaña, donde la naturaleza y los picos más altos crean una atmósfera excepcional.
En Valle Nevado, para vivir esta experiencia única hay que ascender en helicóptero hasta los 4500 metros de altura. Los precios de la propuesta parten de los 600 dólares por descenso, siempre bajo la supervisión del guía de turno de un equipo de hombres con vasta experiencia en la materia.
La doble aventura de viajar en helicóptero, sin siquiera poner en la balanza los soñados paisajes, y esquiar lejos de las multitudes se conjugan para acelerar los latidos del corazón durante algunas horas. Las promesas son vertiginosas y tienen garantía asegurada: bajadas de 1250 metros y paisajes paradisíacos desde lo alto.
Si lo que uno busca es mirar el centro desde otra perspectiva, la opción es hacer aladelta, una nueva propuesta que permite despegar con las tablas y tomar altura para apreciar la belleza del lugar.

EL SNOWPARK SIEMPRE SE RENUEVA

No se llega a divisar desde la base del centro. Tampoco desde todas las pistas. Está tímidamente escondido entre las montañas, en el medio de la pista Tap y a un costado del andarivel Candonga. Se trata del snowpark , un rincón dedicado exclusivamente para los riders que deseen saltar y desafiar la gravedad.
Si en algún lado se pueden sentir cómodos los amantes del snowboard es en Valle Nevado, no sólo por los fuera de pista, sino también por este rincón exclusivo.
Cajones y barandas es lo que sobra en este parador ubicado a unos 3200 metros sobre el nivel del mar. "Este lugar lo vamos renovando en cada temporada, buscando desafiar nuestros propios límites", cuenta Arnau Fernández Desgroux, encargado del sitio y experimentado rider , quien, junto con amigos, hace de este espacio su segundo hogar.
El exclusivo sitio, uno de los más importantes de la región, ofrece sectores tanto para principiantes como para avanzados, además de un paisaje increíble, que también lo convierte en un atractivo para los curiosos que llegan al lugar para disfrutar de la aventura.
Y como si eso fuera poco, será reconocido este año con la llegada del World Rookie Fest, un campeonato de reconocimiento global que hará llegar hasta el lugar a reconocidos jóvenes que prometen con convertirse en futuras figuras mundiales. Todo un orgullo para los organizadores locales.

DATOS UTILES

Cómo llegar

El centro de esquí se encuentra a menos de dos horas de Santiago. El traslado desde allí cuesta US$ 120, ida y vuelta.

Dónde dormir

El sistema de alojamiento puede variar en cantidad de noches y depende el hotel elegido. El programa de cuatro noches en el hotel Valle Nevado, en temporada alta, cuesta US$ 1563 por persona, US$ 1215 en Puerta del Sol y US$ 840 en el Tres Puntas. Hay promociones y semanas especiales.
Además del alojamiento en base doble, la tarifa incluye media pensión (desayuno y cena), aprés ski, pase ilimitado a los medios de elevación, acceso gratuito al spa y cóctel de bienvenida.

Escuela de esquí

La clase grupal es de dos horas y cuesta US$ 42 por persona. Las privadas individuales tienen un precio de US$ 81 por hora.

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