Feria orgánica en Caballito

Vinos y cervezas artesanales, aceite de oliva de pequeños productores, frutas y verduras orgánicas, granos, plantas, semillas, tartas, muffins, comida vegana y vegetariana. Para mí era como un parque de diversiones, tenía ganas de probarlo todo –lo que en parte hice gracias a las degustaciones-. Charlé con algunas de las personas que atendían los puestos y me quedé con sus contactos para conocer mejor los productos que venden.

A las 15:00 comenzó la charla del chef, y amigo del blog, Pablito Martín que dio algunas sugerencias acerca de lo que conviene consumir y las costumbres que deberíamos evitar para tener una alimentación saludable.

-Barritas de cereal: mirar las etiquetas de todos los productos. Cada barrita (las que compramos en los quioscos) contiene veintisiete ingredientes. Al dar vuelta el paquete nos daremos cuenta de que contiene glutamato monosódico , jarabe de maíz de alta fructosa, azúcar, conservantes, colorantes artificiales "naturales". El marketing de la industria vende que es saludable pero esos elementos no lo son.

-El azúcar se incorporó a nuestro organismo hace mil años pero nuestro organismo no necesita azúcar. La podemos incorporar a través de las frutas, por lo tanto es un gusto y no es para todos los días. Por eso es costosa. Conviene comprar "mascabo" que se extrae de la caña de azúcar a través de un proceso de rallado más artesanal. En la elaboración del azúcar orgánico el proceso se reemplaza por una máquina. Ambas opciones son mejores que el azúcar refinado, que no aporta nada al organismo.

-No es bueno consumir edulcorantes, antes de 2001 eran mucho más dulces pero cada vez tienen menor calidad. Lo mejor es ir a un vivero y comprar plantines de stevia. En invierno requiere de mucho mimo pero a partir de la primavera hasta el otoño dan muchas plantas. Se cortan las hojitas y se ponen en 50 cm3 de agua tibia, se deja infusionar y después se utiliza el agua como endulzante. Si no, se puede comprar los yuyos en la dietética.

-Consumir sal marina o del Himalaya, no la refinada de mesa.

-Una de las mayores batallas contra la obesidad es el exceso en el uso de las harinas. Se incorporaron a las comidas industrializadas y hoy causan adicción.

-Tomar una copa de vino, como decía Favaloro, hace bien. Pero también se puede comprar harina de vino, que mantiene todas las propiedades como antioxidante pero sin el alcohol, o comprar la pasa de uva con semilla que contiene resveratrol.

-En invierno también se deben comer verduras crudas ya que contienen enzimas. Las enzimas son catalizadores de nutrientes, ayudan a absorber los nutrientes y tener una mejor digestión.

-Hacer viandas para que los chicos lleven al colegio o para el trabajo. Usar buenos termos de acero inoxidable y envases que conserven el frío y el calor. Aprovechar los vegetales de estación.

-Para las ensaladas se puede hacer una vinagreta casera, un mix de ácido con grasa: Jugo de limón, triplicar el volumen con aceite de oliva, agregar pimienta, sal, cúrcuma, levadura de cerveza.

-No consumir ni congelados ni enlatados. El tema está en incorporar frutas, vegetales crudos, cereales, legumbres. "Escuchar a su organismo". El escritor Michael Pollan dijo "no consumas nada que tu abuela no haya conocido", para algunos su bisabuela.

-Darle tiempo a la cocina: volver a las tradiciones, tratar de no usar tanto el microondas, en un segundo frota las moléculas de la comida casi tres mil veces y eso es lo que consumimos. No hay tanta diferencia en calentar la leche a Baño María y es mejor.

Al cerrar su charla dijo:

"No somos todos iguales, tenemos que decidir cada uno qué hacer con nuestras vidas. No se casen con mi alimentación. Investiguen, lean. Yo la veo a Narda Lepes y Fracis Mallmann y aprendo. Invierto en libros y me va bárbaro. Invierto en calidad de vida, yo no gasto más en medicamentos, no voy a farmacias y no me enfermo".

Me acerqué a Pablito, lo saludé y le tomé esta foto en donde aprovechó para promocionar su libro re-evolucionario:

Fue una buena charla, el público acompaño, hizo preguntas y se rió con sus chistes. De las afirmaciones hubo muchas cosas que me dan ganas de seguir investigando. Por ejemplo, el tema del microondas, ¿de verdad hace daño? Se supone que años de uso deberían garantizar cierto avance en su elaboración. De todas formas coincido en volver a lo tradicional. Con respecto a las barritas de cereal, hace tiempo que dejé de comer las fortificadas, por suerte hay otras opciones, incluso se las puede preparar con granola y miel.

Me despido con una de las recetas de "Con probar no perdés nada", del libro de Pablito, para hacer hummus de una forma práctica.

Dejar en remojo un par de horas dos cucharadas de semillas de sésamo. Lavar 200 gramos de garbanzos secos y dejarlos en remojo con caldo natural de verdura o agua por 24 hs. Al otro día agregar más agua y cocinar en una cacerola hasta que estén blandos (de dos a dos horas y media). Dejar que se enfríen y colar.

Poner los ingredientes en procesadora: garbanzos, jugo de medio limón, ajo picado, semillas escurridas, una pizca de pimienta y otra de sal. Procesar agregando aceite de oliva hasta que quede una masa homogénea.

El hummus o humus es parte de la comida tradicional árabe y queda buenísimo como entrada o para acompañar con pan.

¡Espero que lo disfruten!

Les dejo un beso grande y los espero en kariuenverde@mail.com

Kariu