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FIT: entrega de premios y señales de cambio

Aerolíneas Argentinas y LA NACION, galardonadas

28 de marzo de 2004

La FIT, que es como se la conoce a la Feria Internacional de Turismo para América latina, entregó los tradicionales premios anuales a empresas y organismos que participaron en noviembre de 2003, en Palermo, de la última versión de ese encuentro.

La más grande exposición de esta región es uno de los acontecimientos principales del ámbito del turismo internacional. Se da el lujo de albergar no sólo a América latina, sino a todo el mundo. Siempre está colmada de propuestas al público para las vacaciones, con sus respectivos precios y folletería. A su vez, los profesionales del turismo convierten la feria en un centro de negocios.

Esta vez, en la entrega de premios, los presentes no dejaron una butaca vacía en el amplio auditorio del Sheraron Libertador, lo que dio la pauta de la importancia asignada por los operadores a este acontecimiento. Hubo aplausos, abrazos, fotografías y un clima de entusiasmo.

A Aerolíneas Argentinas le tocó ser la estrella, pues fue adjudicataria del Gran Premio FIT, el más importante, por el stand que presentó. Lo recibió el gerente comercial de la compañía, Carlos Mateu. El primer premio en la categoría medios de prensa nacionales --otro de los tantos adjudicados-- recayó en LA NACION.

Pero también concentró la atención el debut de Tomás Ryan en el estrado como presidente de la FIT, cargo que le corresponde por ser titular de la Asociación Argentina de Agentes de Viajes y Turismo (Aaavyt). Compartió el escenario con el secretario de Turismo de la Nación, Enrique Meyer --que llegó tarde, pero con aviso previo--, y otras autoridades.

Cada año más grande

Ryan destacó el crecimiento experimentado por la FIT en los últimos años, respecto de participantes y metros cuadrados ocupados por los intervinientes de la muestra. En 2003, la feria alcanzó una superficie de 13.400 metros y este año llegará a 14.700. Anticipó que --a 8 meses de su nueva realización-- será un éxito, ya que está vendido entre el 65 y el 70 por ciento del espacio disponible.

Coincidentemente al día siguiente de la entrega de premios, se sortearon los espacios en el pabellón nacional destinados a las secretarías de Turismo de todo el país.

El lugar más grande (1200 m) lo ganaron conjuntamente el Chaco, Formosa, Corrientes, Santa Fe, Entre Ríos y Misiones.

En diálogo con LA NACION, Ryan hizo hincapié en la imperiosa necesidad de la capacitación y actualización de los agentes de viaje para hacer frente al fenómeno generado en los últimos tiempos por el intenso movimiento turístico en la Argentina.

En este acto hubo un cambio fundamental. Por primera vez, los ganadores de los premios se conocieron cuando fueron convocados al estrado para recibirlos. Es decir se respetó hasta último momento la decisión secreta del jurado.

De este modo se aventó la suspicacia que despertó a veces, en años anteriores, conocer con anticipación a los ganadores. "Comenzó la transparencia", comentó uno de los presentes, en referencia a esta nueva modalidad aplicada en la gestión de Ryan.

Durante el acto estuvo en boca de los presentes otro acontecimiento del sector turístico, cuyo anuncio se iba a efectuar al día siguiente: el XXX Congreso Argentino de Viajes, que se realizará entre el 24 y el 26 de junio, en la ciudad de Mendoza, organizado por la Aaavyt.

Todo parece indicar que la reunión tendrá significación para el porvenir de los objetivos de la entidad. En otras palabras, se describe esa ocasión como propicia para comenzar un capítulo signado por la comunicación de propósitos y la voluntad de iniciar una etapa de esfuerzos conjuntos por parte de los agentes de viajes.

En principio, a los que hilan fino en este sector no les pasó inadvertido que el anuncio del congreso se realizara en la Secretaría de Turismo de la Nación. Es decir una entidad privada de pura raza usó el ámbito oficial para difundir su acción.

Esta circunstancia confirmó, de algún modo, la presunción de que la Aaavyt procura fortalecer su posición lo más cerca posible del gobierno nacional.

A simple vista el hecho tiene la propiedad de no ser intelegible para los que carecen de conocimientos en la materia.

Pero es positivo que así ocurra, si se considera ?según opiniones de algunos observadores? que en la práctica la entidad no está en condiciones por ahora de evitar la dependencia del gobierno nacional, porque de éste depende más de una medida que favorecería al sector.

Por Julio Aguirre Chaneton
De la Redacción de LA NACION

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