Estoy harta de los carrouseles emocionales de los demás, de aquellos que se tensan y se fastidian por la primera estupidez que los complica. Y harta de dejar una rendija abierta por la cual se cuela la tensión ajena y hace de mí TAMBIÉN un carrousel emocional.
Y antes de seguir, aclaro que estoy HARTA de que cada vez que escribo o verbalizo estar "harta", una vocecita espiritualmente correcta me advierta cual loro ciruela: "enfocate en lo que deseás." Harta de vos, vocecita mosca muerta, andate a la mier...
Y ahora sí, dicho esto, y reconociendo que mi deseo es denunciar a los cuatro vientos aquello de lo que estoy hasta la coronilla, procedo a continuar con mi lista:
Harta de la gente esnob, de la tilinguería, de la frivolidad. De esa pseudo-espiritualidad que todo lo lava y pseudo-aligera... y esa vanidosa apetencia por aparentar una seguridad falsa, a ojos de la audiencia.
Harta de las personas que no trabajan su deseo ni su envidia y son cómplices de su enana jodida (mientras te dicen "divina" o "linda").
Harta de los eufemismos a las que uno recurre por miedo a que se revele la propia enana jodida, o acaso la guerrera filosa, esa que pide a gritos que le den bola.
Harta de aquellos que adoran con obsecuencia nombres y apellidos, marcas, etiquetas, conceptos grandilocuentes, filosóficos, con aparente peso... e ignoran y desprecian la calidad y calidez de lo vivo, de lo anónimo, de lo que no ostenta, de lo genuino.
Harta de los discursos en los que me adjudico todos los méritos y me victimizo.
Harta de victimizarme, sí, pero también de no poder hacerlo porque la vocecita mosca muerta te viene a bajar línea. Harta de que toda la responsabilidad de mi vida sea propia... y harta, carajo, de las contradicciones de mi persona.
Harta, por último, de la solidaridad que se dice (y no se ejerce), de la huevada cósmica de la tele, de la bipolaridad política, de los intereses capitalistas y de la vida al trote, desquiciada, ya, urgente, a las corridas... que no asume su propia muerte.
Hoy es día de catarsis, ¿de qué están hartas ustedes?
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