Holanda, el país de las flores

Detrás de las dunas, entre Laiden y Haarlem, en suelos arenosos, se plantaron bulbos turcos por iniciativa del botánico Cárolus Clusius. Así se originó una de las atracciones más grandes de Holanda, los campos de tulipanes.

El tren que nos lleva a Amsterdam pasa velozmente, se mezclan los surcos, las franjas rojas, amarillas, moradas. Holanda es un muestrario de flores, narcisos, lirios, lilas, gladiolos. ¿Sabías que Holanda es conocida como El país de las flores?

Es común ver al holandés, hombre o mujer, con un ramo de flores bajo el brazo, para una visita o para agasajar a su propia familia. Todo Holanda es un jardín.

Tienen 14 millones de bicicletas y 15 millones de habitantes. Las rutas y calles de las ciudades tienen carriles especiales para las bicicletas y los semáforos correspondientes, y se respeta muy especialmente al ciclista. Además de ciclismo por comodidad, practican deportes acuáticos, como piragüistas entre los canales, rafting en el mar revuelto, submarinistas en el Oosterschelde, ciclistas acuáticos en Utrecht.

Cuando llega el invierno, Amsterdam se cubre de pistas de hielo para patinar, mientras los puentes se visten de luces esperando la Navidad. Holanda no sólo es Amsterdam, conocer el país es una experiencia inolvidable. El holandés parece retraído como temeroso, pero haber vivido en el país te da una idea exacta: son amigables, muy educados, hospitalarios, amables. Los domingos y días de fiesta están vestidos con ropas típicas, vendiendo queso y pescado en los pequeños puertos. ¡No lo pienses más! ¡Holanda allá vamos! Me apasionó. ¿Será porque tengo un nieto holandés?