*Post publicado por Hijadefruta, comentarista del blog.
Les cuento. El sábado 22 de noviembre de 2009 llegué a Lima en un "vuelo directo" y creo que nunca me fui.
Durante 2010, fuimos y volvimos varias veces Córdoba-Lima-Córdoba y viceversa. Crecimos en la distancia durante 12 meses y el 26 de diciembre de 2010 me vine a vivir, a echar raíces aquí. Pero no es exactamente esto lo que quiero compartir con ustedes, lo que siento que me enorgullece como ser, sino el hecho humano y sano del despojarse.
A los 35 años tenía trabajo (el que siempre había soñado), auto, departamento íntegramente armado, todos o muchos de los electrodomésticos que se imaginen, terreno, proyecto de casa propia, rutina, bici y sobre todo, una seguridad falsa o inventada o mejor dicho, innecesaria.
Eso lo veo ahora, claro.
Con la decisión de dejar Argentina para compartir mi vida con Luis tuve que, inevitablemente, comenzar con el proceso de renuncia.
A medida que fui perdiendo voluntariamente casi todas mis cosas, me fui encontrando conmigo misma, con una María Inés más esencial, con una María Inés valiente y poderosa, capaz de adaptarse y lo más importante, ser feliz sin nada. O con poco.
Sí. Me obligué a soltar lo que ya no servía, lo que había perdido vigencia. Me despojé de todo lo que había acumulado. Me despojé de cosas materiales. Me despojé de prejuicios que me anclaban a mi círculo de confort, me despojé incluso de mi familia y amigas, por lo menos, de poder contar en lo inmediato con sus mates y favores.
Me vine liviana, me permití ser libre y seguir mi deseo. No fue un empezar totalmente de cero, ¡no! Vine a Lima con la certeza de un sueño y así lo confirma lo que estamos construyendo.
Ahora sé que podría volver a hacerlo y, que como todo lo que ya vivimos, resultaría más fácil y menos incierto. De tener que repetirlo, tendría muy pocas cosas materiales de las cuales librarme, y sólo me preocuparía por conservar a este maravilloso compañero, que todo lo torna más bello, y más disfrutable.
Ustedes, ¿qué nos cuentan? ¿De qué cosas creen que sería sano despojarse?
PD: Com-parto con ustedes que ya estoy de 36 semanas.
En esta nota: