Estoy bien. Sepan que por muy desbordada que esté (en una época en la que eso es inevitable que pase), conservo siempre una cuota mínima, razonable, de lucidez. Y no olvido nunca el caminito de regreso. Ese caminito para volver a estar alineada, y sentirme alegre, entusiasta, confiando en el diseño mágico-intrincado de este universo.
Gracias a todos por sus palabras. Fueron lindas.
Escribir el post, por lo demás, es parte de un trabajo de orden y verbalización necesario para seguir bailando. En el momento en el que termino con el texto, ya algo -o mucho- de todo eso se está moviendo.
Y hoy quiero hablar de mi mejor amiga (en este último tiempo). Y las invito a que cada una le hable a su respectiva (amiga, desde luego).
Quiero hablar de una mujer que me está enseñando a sentirme hermana, y sobre todo a saberme cuidada.
Una persona SIMPLE, profunda, cero canchera, concretísima, que está para lo esencial y en el día a día. Una persona que se comprometió conmigo y mis hijas de una manera insólita, divina. Alguien que me quiere y me quiere bien, que no sólo sabe aconsejarme, sino que además se involucra con el cuerpo, con la presencia, toda ella entera. Nunca me da vergüenza llamarla, ni nunca siento "uy, la voy a molestar en este momento". No, ella siempre está con tiempo. ¡Y eso que yo a veces me voy por las ramas!
Yanet, mi vida sería igual sin vos, y a la vez no. Me conmueve saberte tan presente. China, Lupe y yo te queremos un montón. Gracias por todo tu cariño, por todo tu amor. Sos una tipa tan sabia, tan generosa, tan despojada y con los pies tan en la tierra, tan atenta. ¡¡¡Ojalá algo de todo eso aprenda!!!
¿Qué valoran de su mejor amiga? ¡¿Qué le agradecen?! ¿Cuánto la quieren?
PD: Me voy al jardín, después les cuento. Mañana es mi cumple, qué momento.
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