Newsletter
Newsletter

Mi primer beso




No fue técnicamente mi primer beso, pero sí Mi Primer Beso. En realidad, fue mi primer beso completo. El primero o los primeros habían sido besos temerosos, superficiales, era una púber de 13 y le tenía miedo (quizás asco) al encuentro de mi lengua con la lengua del otro. Besaba sólo con labios.
Así había sido 2 o 3 veces, con 2 chicos distintos, hasta que apareció Él, mi Primer Beso. De la mano de mi primer amor. Oh, sí, se endulzaron con el texto de Sole (yo también), no quería que cambiásemos de tema tan rápido.
¿Cómo fue ese primer beso? Me pasó a buscar por mi casa. Por departamento de Juramento 1805 (recuerdo todas las numeraciones de mis 14 domicilios... consecutivos). Recuerdo que fue mi padre, creo que fue él el que atendió el portero y me dijo: "Es Germán. Está Germán esperándote abajo".
Germán era el chico que me gustaba hace año y medio. Estaba perdidamente enamorada de ese chico. Y como NUNCA en mi vida, como NUNCA en mi vida me había quedado guardada, en el sobre, haciendo circular la información entre amigas, que a su vez se hablaban con sus amigos, o entre amigos de mi hermano... (él era compañero de mi hermano en el colegio) pero no haciendo, ni diciéndole NADA. Represión absoluta. Apenas escribía en papelitos. Le escribía. Tenía una carta que era pura grasa, que muchos años después seguí leyendo (nunca se la di) y me mataba de la risa.
Detalle: este muchacho estaba de novio cuando lo conocí. Y de novio con una modelo muy conocida. También del colegio. Bueno, peor todavía: se hizo conocida justo en ese momento. Tapa de revistas, cuerpo escultural, su hermana un tiempito saliendo con el mío. Todo complejo.
Así y todo, nunca perdí mis esperanzas y ese día, esa tarde (el chico ya había terminado el noviazgo para ese entonces) tocó el portero. Bajé. Él estaba al pie de las escaleras, pfff, mi corazón latiendo. Me propuso ir a caminar por ahí. "Dale". Era alto, muy alto. Y terminamos en la plaza de Tres de Febrero, la de Barrancas, las famosas Barrancas. Charlando. Como tantas veces lo habíamos hecho.
Y en eso, me recuerdo sentada sobre el borde de un camino, de esa manera estábamos a la misma altura... en eso me acercó su cara y con una naturalidad inverosímil, con una fluidez que yo no tenía, que no creía tener, me besó, nos besamos. Por primera vez. Probablemente también nos abrazamos y nos dijimos alguna linda tontería, eso no lo tengo tan en mente. Sí el beso, ese gesto bisagra... que fundó mi primer noviazgo. No bastó más que ese beso para que esa relación romántica empezara.
Después vinieron otros muchos besos. Pfff, no podría contarlos. No con él, digo, con otros hombres. Me besé variado (?), y me gustó hacerlo. Pero de esos muchos besos sólo unos pocos fueron Primeros Besos... como ése. Fundantes de algo nuevo.
Muy pocos primeros besos que a su manera recrearon el primero. Todos distintos, sí, pero igualmente ¿acertados? ¿Igualmente entregados? No sé cuál sería el adjetivo. Tampoco creo que fuera el beso el responsable de lo que estaba en juego, sólo símbolo de un gran encuentro.
¿Cómo fue tu Primer Beso? ¿Te animás a recrearlo?
¡¿No es éste uno de los mejores temas de Primer Beso en el cine?! No pude encontrar la escena, pero si cierran los ojos y escuchan la canción, seguro la recuerdan.

PD: Está abierta inscripción al Seminario de febrero del taller de expresión escrita. Para más info: Ablandando la mano. Para contactarme por privado: inetaller@gmail o en FB como Ine Sainz.

¡Compartilo!

En esta nota:

SEGUIR LEYENDO

“Muchacha, hacete el Papanicolaou”

“Muchacha, hacete el Papanicolaou”

Tapa de OHLALÁ! julio de Nico Ochiatto

 RSS

NOSOTROS

DESCUBRÍ

Términos y Condiciones


¿Cómo anunciar?


Preguntas frecuentes

Copyright 2025 SA LA NACION


Todos los derechos reservados.

QR de AFIP