Moda y embarazo

por

Guadalupe Malter

29 de mayo de 2017 • 00:20

Los cambios físicos de una mujer embarazada son evidentes. Pero, ¿qué hay de los psicológicos y emocionales?

La montaña rusa de sentimientos, nuevas ideas y la mirada personal sobre el mundo que me rodea, empezó a cambiar de una forma que cuesta entenderla.

A partir de este momento y en adelante la mujer que era, se transforma en una nueva versión para darle comienzo a la próxima etapa de mi vida.

Observando esto, comencé a recolectar información para nutrirme de todo lo que tengo que saber. Libros, cursos, aplicaciones y charlas con otras madres que me llenan de consejos para atravesar el hoy y lo que vendrá.

No importa cuanta data reciba todavía hay cosas que no logro procesar a tiempo.

Hace poco leí estas líneas que me aclararon un poco el panorama:

“La espera de un hijo puede generar mucha ambivalencia a nivel emocional, pasar de la alegría, la satisfacción, el amor, un sentimiento de realización personal al duelo por la situación perdida, el miedo, la irritabilidad, la duda, la sensibilidad, lo cual además está muy influenciado por el cambio hormonal que se da durante el embarazo.

Teniendo en cuenta estos cambios y muchos otros, podemos decir que el embarazo es una crisis en la vida de la mujer, crisis en el sentido de la oportunidad de crecimiento, de ampliación de la consciencia, de un gran aprendizaje”

Esto me invita a replantearme la forma en la que encaro mi trabajo. ¿Qué mensaje quiero transmitir? ¿Qué información estoy compartiendo? ¿Estoy aportando cosas buenas al mundo?

Con el cambio que estoy atravesando me siento responsable de hablar de manera consciente, donde tengo la posibilidad de conectarme con miles de mujeres a través de temas que realmente nos hagan bien y tengan un propósito.

Hoy quise compartir esta reflexión porque lo siento parte del proceso en el que estoy.