Momentos

China, tirada a mi lado en la cama, husmea por dentro mi remera y me tira: "mami, ¡tus tetas se parecen a cara de papa!"

Sábado al mediodía en el arenero, viendo a China y Cornelio (compañero del jardín) correr detrás de burbujas de jabón, jugando a ver quién las aplasta primero.

Por la tarde, sentada entre ambas hijas en el sillón del living, mirando un documental acerca de la vida de los pingüinos (La Marcha de los pingüinos)... y mientras voy preguntándoles obviedades ("¿vieron el pingüino bebé? ¿Vieron cómo camina?"), me doy cuenta de que las dos, casi al unísono, se han quedado dormidas.

Ponerme a meditar. Volver a conectar desde la más absoluta intimidad con mi comunidad, acompañarla. Rezar y pedir para que se sanen heridas pasadas.

Todavía con niñas durmiendo, mientras lavo los platos: que me vuelva a bajar la certeza de que ya no me interesa ser "alguien" (destacarme en lo individual), sino que ahora ambiciono poder regalar segundos (minutos, en el mejor de los casos) de espontaneidad, de frescura, de reflexión-de-a-ratos (y ya).

Que China haga su número de clown, haciendo que se cepillaba -con cepillo de dientes- las axilas... y juá, juá. Y en un momento, que asuma: "soy una tontita."

Que marido llegue de viaje y les regale a las niñas unos llaveros artesanales; para los cierres de sus mochilas rosa chicle. Poder apreciar el contraste.

Ponernos a dibujar. Quedarme atontada mirando las torpes-bellezas de mi hija, ir guiándola desde la palabra pero respetándola.

...

"Momentos en los que me olvidé de mí misma", así se me dio por llamar a estos instantes de gracia, momentos en los que dejé de ser "yo", con toda mi historia y mi carga, con las miles de proyecciones y expectativas, y simplemente dejé que me asalte la circunstancia.

¿Ustedes qué me cuentan?

PD: ¡Felicitaciones a Corazón de arroz, Bich3rio, unamujersimple y cansadadepensar! Se decidió que fueran 4 las elegidas porque había habido excepciones en los votos (algunas votaron a 3) y la diferencia entre las últimas era mínima.