Para terminar 2015: los logros silenciosos

En la columna anterior abrimos un Tiempo de Balance, dando lugar al ejercicio de mirar hacia atrás el año que ya acaba. Ahora seguimos con esta propuesta porque un buen cierre ayuda a facilitar un buen comienzo.

Muchas veces el balance que hacemos de nuestro año queda demasiado teñido de lo que pasó sólo en el último par de meses o, sobre todo, muy acotado a hechos puntuales que resultaron significativos. A esto se suma que solemos tener bien fresca nuestra lista de pendientes y nada presente nuestra lista de logros. Es más, cuando resolvemos algo importante que venía pesando sencillamente lo eliminamos de la lista de pendientes pero no lo pasamos a la de logros.

La idea entonces es ver si hay otra manera de observar, un enfoque que permita poner en valor los logros y no considerar solo los estridentes sino también los silenciosos. Los primeros suelen ser los más obvios y tener una fecha específica: "Este año… (completar con el hito que corresponda: Hice un viaje / Encontré un amor / Di mi última materia)". Los silenciosos, en cambio, suelen ser graduales y corren riesgo de pasar desapercibidos.

Estos son algunos de los logros silenciosos:

•"Me tengo más paciencia"

•"Pude ayudar a otros"

•"Aprendí a hacer paso a paso, sin que me encandilen expectativas grandilocuentes"

•"Reflexiono antes de hacer compulsivamente algo de lo que después puedo arrepentirme"

•"Dejé de rumiar y empecé a hacer"

•"Pude establecer prioridades y organizarme para que el trabajo no me desborde"

•"Acoté la dispersión"

•"Actué con mayor generosidad"

•"Enfrenté pendientes que se habían vuelto crónicos"

•"Mejoré las formas en que me manifiesto"

•"Aumenté la confianza en mí"

•"Me animé a golpear puertas"

•"Me di permiso para el disfrute"

•"Le di lugar a nuevos proyectos"

•"Consolidé mis vínculos saludables"

Estos logros silenciosos implican una evolución, una proyección positiva, muestran "Estoy en el camino por el que busco ir". Y ayudan a redefinir un criterio de éxito que muchas veces está conformado solo por los logros rutilantes.

¡Les deseo un buen balance!