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Perdidos en un laberinto de médanos y acacias

Es el más grande del país y está hecho sobre la arena; además se realiza un Vía Crucis

10 de marzo de 2013

"Chau y acordate que hoy es sábado, vos entraste el jueves", se escucha desde la entrada, como chiste muletilla a un hombre que por fin encontró la salida y se despide del laberinto bastante cansado.

Seguramente el hombre entró más o menos una hora atrás y seguramente estuvo caminando toda la hora por la arena, entre arbustos de acacias naturales, en busca del mirador central que otorga el pasaporte a la salida.

El Parque Temático del Laberinto está en el centro de Las Toninas (Av. 7 y Calle 16), uno de los balnearios del Partido de la Costa, a poco más de 330 kilómetros de Buenos Aires, y es uno de los paseos más divertidos para los días que el tiempo no permite ir a la playa. No sólo para los chicos. Los grandes son los que más se toman en serio el encontrar la salida antes que otros.

Es un gran laberinto de 6400 m2 construido sobre médanos naturales y arena floja, que claramente le aportan una cuota más de dificultad al por sí intrincado mundo de arbustos y caminos sin salida.

"Es el más grande del país y el único sobre arena. Cómo mínimo para llegar al centro hay que caminar el equivalente a 8 cuadras, si no tenés suerte mucho más, entre subidas y bajadas", cuenta Héctor Dopazo, encargado de darle vida a este original paseo para toda la familia y también el responsable del chiste a los que salen con la lengua afuera.

Era un viejo laberinto municipal que estuvo mucho años abandonado. Dopazo presentó un proyecto de recuperación. Tardó dos años en ponerlo a punto. Plantó más de 1800 acacias nuevas que permanentemente se encargan de podar para que no crezcan.

Tiene 15 caminos sin salida, uno solo conduce al centro, donde hay un mangrullo al que se puede subir para ver el laberinto desde arriba, el pueblo y hasta el mar.

Además del laberinto, en el parque temático el viernes y sábado de Semana Santa se realizará una representación del Vía Crucis Viviente, con ambientación lumínica y sonora, al caer la tarde.

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