Y hoy tenía pensado hacer día de PMs, ¡pero una de Uds. me sugirió algo mejor! ¡Fuego violeta! Perdón por la risa (me tenté) pero de golpe recordé aquél comment que esta semana decía: "no entiendo nunca lo que dice esta mujer". Jaja
¿Se animan a hacer... no ya una gran fogata, sino una suerte de cocina colectiva?!
Un fuego al que vayamos tirando todo, todo, todas las molestias, miedos, cruces, asperezas, altercados, disgustos, chiquiteces del estilo que fueren, que hayamos tenidos estos últimos días.
Una llama que reciba todo ese sinsabor que vivimos y lo transforme en una comidita que de sólo olerla de lejos, nos abrace y nos renueve. ¿Se animan? ¿Sí?!
Acá empiezo:
Tiro ese maldito momento en el que China se abalanzó sobre los bombones y la taza con té recién servido se le volcó en su bracito. Tiro mi bronca, ¡mi enojo! por no haber podido evitar el episodio.
Tiro todas las idas y vueltas al Hospital y los roces absurdos que en esos trayectos se generaron con Federico.
Tiro la fiaca y el cansancio por estar dándole vueltas y vueltas a un último trabajo (capítulo).
Tiro los miedos de mi nena vulnerable (mi nena interna) que teme que no la quieran o que se olviden de ella.
Y tiro la pena gigante que me dio saber lo de Malena.
¡Fuerza, Malena! Y un abrazo de oso virtual para todos y que este finde e invierno nos reencuentre ligeros, confiados, abiertos, contentos... y fortalecidos.
LOS QUIERO y GRACIAS
En esta nota: