Cuando era chica amaba ver tele a la tarde. ¿Les pasaba lo mismo o preferían jugar a la pelota o a las muñecas? Si la mañana era para ir al colegio y cumplir con mis deberes de mini-ciudadana, la libertad empezaba a eso de las seis, cuando me podía adueñar de la tele y ver lo que yo quisiera. Algunos de los dibujitos que más me gustaban eran los clásicos: Tom y Jerry, El Coyote y el Correcaminos y claro, Bugs Bunny (también Mazinger Z, He-Man y Thundercats). Pero tenía debilidad por el conejo que siempre zafaba de ser comido gracias a que era más vivo que todos los que querían atraparlo. Bastaba con escuchar la musiquita del comienzo para saber que otra vez me iba a divertir con las "Fantasías Animadas de ayer y hoy". Y nunca me equivocaba.
Les propongo en este jueves gris viajar a esa etapa de la infancia en que la responsabilidad más grande era hacer la tarea para después salir a jugar:
Bugs Bunny se divierte con un cubano
Yo no sé si me gustaba la zanahoria por Bugs Bunny o porque de verdad era rica, pero recuerdo mis intentos de comerla igual que él, de costado, en pose cancherita. Aunque hoy la prefiero rallada, sigue siendo una de mis hortalizas preferidas. La Daucus carota subespecie sativus, o zanahoria, para los amigos es en un alimento ideal por todas sus propiedades y es de estación, así que podemos encontrarla fresca en las verdulerías. No está de más mencionar que es mejor consumirla orgánica.
Una buena combinación: verde y naranja.
Es rica es fósforo, por lo que es útil para aliviar el cansancio y los nervios. El betacaroteno tiene efectos beneficiosos, es antioxidante y protege la piel y las células. Además la zanahoria es diurética y ayuda a la digestión. Conviene comerla cruda para absorber todos sus nutrientes. A mí me gusta en jugos y licuados, combinada con apio, naranja y jengibre o menta. Un detalle genial es que las raíces también se pueden aprovechar. En guisos vegetarianos se recomienda hacerla al vapor y en pastelería es una opción más que interesante.
Licuado de zanahoria y apio
El otro día Pedro Lambertini publicó en su Facebook una receta que me tentó mucho y que mi hermana Bea adaptó después.
Empiezo compartiendo la de él, que dice que de todas, es la mejor receta de Carrot Cake que probó.
Carrot Cake Integral
Ingredientes:
(Rinde una cintura de 15x25 cm, 25 porciones)
• 6 huevos de campo
• 190 g de manteca (mantequilla)
• 1 ½ taza de harina 0000 (harina común para todo propósito)
• 1 ½ taza de harina integral fina
• 3 cditas al ras de bicarbonato de sodio
• ¾ cdita de sal fina
• 2 cdas de canela en polvo
• 2 cdas de jengibre fresco rallado
• ¾ cdita de nuez moscada rallada
• ¾ taza de aceite neutro (maíz, girasol o canola)
• ¾ taza de miel pura
• 1 ½ taza de azúcar rubio u orgánico
• 1 cdita de extracto de vainilla natural
• 200 g de nueces
• 500 g de zanahoria rallada no muy gruesa
Cubierta
• 1 kg de queso crema entero
• Ralladura de dos naranjas
• Jugo de 1 limón
• 300 g de azúcar impalpable
• 500 g de chocolate blanco
• 150 g de nueces picadas o 3 cucharadas de semillas de amapola
Procedimiento:
- Precalentar el horno a 160°.
- Mezclar las harinas con la sal el bicarbonato previamente tamizado (nada más traumático que encontrar dentro de una torta un cascote de bicarbonato, no se lo olvidan más), las nueces picadas groseramente, la canela y la nuez moscada (sí, nuez moscada en pastelería).
- Batir la manteca a punto pomada con el azúcar, la vainilla, el jengibre, los huevos, la miel y el aceite.
- Mezclar las zanahorias con la preparación anterior y agregar los secos.
- Volcar en el molde previamente enmantecado y enharinado y hornear durante 40 minutos o hasta que al pinchar un palillo en el centro este salga seco.
- Para el frosting primero conviene escurrir el queso crema con un día de anticipación. Para ello forrar un colador chino con varias capas de papel de cocina, colocar el queso crema, más papel y dejar reposar en la heladera con un peso encima y un recipiente donde escurra el suero.
- Por otra parte picar el chocolate blanco y derretirlo a baño de María cuidando que el fondo del bol no toque el agua caliente (mejor hacerlo con el fuego apagado).
- En otro bol mezclar el queso escurrido con la ralladura de naranja, el jugo de limón, el azúcar impalpable, el chocolate derretido y batir hasta obtener una crema suave.
- Con una espátula cubrir la torta ya fría y llevar al frío durante 1 día, lapso después del cual los sabores se habrán complejizado y la cubierta tendrá una consistencia como de "cheesecake" gloriosa. Porcionar y decorar cada cuadrado con zanahorias en almíbar, nueces picadas o semillas de amapola.
Carrot Cake de Pedro Lambertini, una belleza, nene. (En tono Bambino)
Mi hermana Bea, que tiene una mano increíble, adaptó la receta, y ante mi pedido bajó la cantidad de huevos a cuatro y le puso menos manteca. Aunque fue sin cubierta, igual quedó deliciosa y húmeda. Y con esa cantidad hasta le salieron dos tortas.
Carrot Cake made in Lanús
Espero que les guste la idea y hagan la que tengan ganas. Me gustaría probar la opción vegana, así que si me animo la haré en estos días, ¡cuenten ustedes qué les pareció!
Hoy que por fin empieza el Mundial, y que tenemos muchos partidos por delante para ver, (y que ojalá Argentina gane todos) tal vez sea una buena excusa para juntarnos con amigos y familiares y aprovechar para compartir comidas ricas y naturales.
Les deseo Feliz Día del Padre a todos los que tienen el gran regalo y responsabilidad de serlo, y un abrazo enorme para los que lo llevamos en el corazón.
Antes de despedirme, les aviso que este fin de semana hay nuevamente feria de Sabe la Tierra en Palermo .
Los leo en kariuenverde@gmail.com
¡Besos!
Kariu
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