Sexo: fantasías en hotel

Valeria Carina Massimino

Especial para RevistaOHLALA.com

"La más pedida es la habitación temática ‘Aula Escolar’. Hay pupitres, un pizarrón, tizas, una campana, todo esto para que las parejas cumplan su fantasía", relatan los empleados de O´Tello, un albergue transitorio con gran trayectoria en el barrio de Devoto. "Sentimos que hacen sonar la campana seguido. Realmente cumplen la fantasía. También nos piden guardapolvos y demás cosas", agrega uno de los conserjes.

El por qué es muy claro para la Licenciada en psicología Mariana Goldring; coordinadora Adjunta del departamento de Investigación y Docencia en Clínica de APBA. (Asociación de Psicólogos de Buenos Aires): "La sexualidad bien entendida es como un juego. Las parejas libres mentalmente y con una sexualidad sana que quieren ponerle aditamentos de juego y fantasía eligen todo tipo de opciones temáticas por curiosidad", explica

Y a la hora de jugar, las edades marcan la diferencia. Para José Rosell, uno de los gerentes del hotel Magnus, en Don Torcuato, quienes asisten rondan entre los treinta y cuarenta años. "Notamos que los más jóvenes ya no vienen tanto, seguramente porque en las casas los padres se volvieron más permisivos, y los chicos comparten habitación con sus parejas cuando se quedan a dormir".

Hasta el año 1998, existía una reglamentación que no permitía ni el ingreso de más de dos personas por habitación, ni del mismo sexo, pero luego se derogó y ahora se permite el ingreso de parejas gay. Pionero en esta materia fue la cadena Axel Hotels, -acá en San Telmo- que ingresó al mercado con el concepto heterofriendly. Nació en Barcelona en el año 2003 y su filosofía habla de "un lugar para todos". Elvio Cornetti, su gerente general aclara: "fue pensado para gays, porque el dueño que tuvo la idea es gay y no veía eso en ningún lugar del mundo, incluso lo hacían sentir incómodo". Acá, la onda es diferente. Las 48 habitaciones hacen foco en el diseño y cuentan con jacuzzis, saunas, jardín con piscina exterior climatizada y spa, para pasar una o varias noches distintas. "Hoy que hablamos de matrimonios igualitarios, libre pensamiento y aceptación de las diferencias sexuales, tampoco podemos hacer diferencias a la hora de las fantasías", señala la Licenciada.

Los tiempos han cambiado. Hay una rapidez en todas las actividades de la vida, incluyendo las relaciones, entonces el mercado se adapta a los tiempos y a las peticiones de las personas. Es satisfacer el placer una y otra vez. Decía Lacan que el deseo nunca se satisface del todo… La Licenciada Goldring lo explica en sus términos: "Si a la imaginación le agregamos un contexto distinto y divertido, podemos jugar o fantasear más. Y mientras todo lo que se haga sea consensuado con la pareja está bien".

Y justamente a eso se debe la particularidad y el éxito de Bahía del Sol –en Capital Federal- que surgió a partir del año 2006 cuando se permitió el ingreso a las habitaciones de más de dos personas (con un límite de cuatro). "La movida "swinger" fue muy grande y no había un ambiente adecuado para los que querían llevar a cabo esa práctica. Acá brindamos ese espacio, con higiene, seguridad, y por sobre todo, tenemos un lugar contenido. Es simple, nos acomodamos a la demanda", explica Ricardo Fernández, conserje de este lugar en el que también hay una habitación de temática "Sado". "Pero es light - revela Fernández y añade- hay una celda, y la luz acompaña todo el ambiente, con decoración acorde porque las personas buscan un lugar apacible, no el típico albergue. Y no escatiman en precios cuando de placer se habla".

Una habitación muy pedida es la del caño . La televisión llevó a las personas a pedir lo que ve.

El cuarto La Baticueva -con Batman y todo- la sacaron de O’Tello porque no tuvo más éxito y la reemplazaron. Pero el cuarto que recrea los años ´50: como si fuera una película de Olmedo y Porcel con lentejuelas y tules, sigue vigente.

En el día del maestro piden mucho la habitación "Aula escolar", después encuentran dibujos en el pizarrón

Hay parejas consolidadas y parejas del momento. La trampa siempre está y se ve más de lunes a viernes. Igual el que está de trampa no se preocupa por la temática de la habitación.

Hace tiempo que dejó de ser un espacio tabú para convertirse en una salida más. Para matrimonios que escapan a la rutina o para los que se inhiben incluso porque puedan escucharlos los vecinos.

A veces no es que les falte lugar en la casa, si no que montar la escenografía de algo imaginado lleva a jugar como artistas.

Algunos se renovaron y hasta sacaron la típica luz roja.