Charla con Mica Riera: ¿qué le dijo Fabi Cantilo antes de interpretarla en El amor después del amor?

Antes de comenzar a grabar un nuevo proyecto televisivo, Mica charló con OHLALÁ! sobre cómo fue la experiencia de convertirse en esta estrella del rock, cuál fue la escena más difícil de rodar y cómo fue el encuentro con Fito Páez, a quien creció escuchando en su casa de Santa Fe.

-¿Cómo te llegó la propuesta para estar en la serie e interpretar a Fabi Cantilo?

-Me mandaron el casting por mail, pero al principio no lo abrí porque el asunto decía: actriz/cantante y a mi cantar me da fiaca. Si bien muchas veces me ha tocado cantar en los trabajos que hice y me defiendo, no me gusta, no es algo que disfruto. Así que no le di bola, pero cuando a la semana lo abrí, vi que decía que era para interpretar a Fabiana Cantilo y ahí dije: “ay sí, no me importa nada” (risas).

-¿Cómo fue el proceso de selección?

-Tenía que mandar una canción con la guitarra entonces grabé “Mi enfermedad”. Fue fácil porque, si bien yo no toco la guitarra, eran tres acordes nada más. Lo mandé y después de eso me volvieron a llamar para que haga una escena. Entonces, llamé a un amigo que la conoce mucho a Fabi y le dije que necesitaba que me ayude para parecerme en sus gestos y su forma de hablar. Me acuerdo que fui a su casa y cuando salí del baño vestida y maquillada como ella, me dijo: “boluda, sos igual”. Ahí me di cuenta que tenía un montón de chances. Luego vino una tercera etapa que ya era presencial. Me pasaron el casting con una semana de anticipación, así que estuve toda esa semana encerrada en mi casa mirando videos sin parar para terminar de imitar su tono de voz, sus reacciones cuando se sorprendía o cuando cantaba, cómo ponía las cejas, etc. Ese fue el primer armado de personaje, que fue más que nada una imitación.

-¿Fuiste al casting lookeada?

-¡Recontra! Esa semana, sólo salí para ir al local de ropa de una amiga y le dije: “Vestime como si fuese Fabi en los 80’s”. Fue muy gracioso porque el día de la audición salí de mi casa ya en personaje, imitándola y me crucé con una vecina que no entendía nada porque yo estaba con la energía al palo; creo que recién ahora debe estar entendiendo todo (risas).

-Además de todo este trabajo previo de mirar videos para sacar sus gestos, su forma de hablar o caminar, sabemos que pudiste charlar con ella… ¿cómo fue ese encuentro?

-Ese encuentro me sirvió para darle más profundidad al personaje porque yo venía trabajando algo más exterior, lo físico, lo gestual pero necesitaba entender cómo pensaba ella, qué la hacía tomar las decisiones que tomaba, decir lo que decía. Así que aproveché para hacerle mil preguntas de todo lo que se puedan imaginar: desde cómo era su relación con Charly hasta cómo era su relación con el Flaco Spinetta o qué pasaba con ella en esas épocas tan oscuras. Fue una conversación larguísima y muy buena porque, a partir de ese encuentro, mi personaje ya no era sólo la carcasa sino que comenzó a tener un cerebro y ese cerebro hizo que todo el cuerpo se mueva de manera diferente.

-¿Te dio algún consejo o te hizo algún pedido en particular?

-Lo único que me dijo cuando terminó la charla fue: “Estoy muy contenta de que seas vos. Me deja muy tranquila que seas vos la que haga de mi”. Eso fue algo muy lindo porque es como que me dio su bendición.

-Y ahora que la serie ya salió, ¿tuviste alguna devolución por parte de ella?

-Sí, nos juntamos a ver un par de escenas y le re gustó. Me dijo que se divirtió mucho y que la había sacado muy bien. ¡Y que se la comió en una noche! Imagino que debe haber sido muy intenso para ella ver escenas basadas en su vida de momentos muy oscuros, no deber haber sido fácil. De hecho, me dijo que por momentos la había angustiado la historia, así que funcionó.

-En los últimos días, se generó una fuerte polémica cuando Fabiana dijo que la serie había mezclado los tiempos y que había minimizado su carrera… ¿qué opinas?

-Siento que el mundo no está preparado para una persona que dice lo que piensa sin pensar en las repercusiones. Eso tiene su parte linda y su parte fea. La fea es que los otros también son libres de pensar y decir lo que quieran y la linda es esto que Fabi siempre tuvo de ser tan libre y transparente.

-¿Te cambió la percepción que tenías de ella a partir de esta serie?

-Creo que no. Yo siempre la vi como la reina del rock y la sigo viendo así. Creo que le di más sentido a lo que pensaba. Antes no conocía todo el trasfondo y hoy, que lo conozco, la respeto el doble.

-¿Cómo estás viviendo la repercusión en la calle? ¿Qué te dice la gente?

-La gente no me reconoce y eso es muy gracioso (risas). Ya tengo el pelo más largo, no tengo flequillo, ando sin maquillaje, no estoy vestida con pollerita, entonces ya no me parezco en nada a ella. Igual tampoco es que salí tanto eh, estuve mucho en casa en el taller de cerámica. Pero sí me pasó una anécdota muy graciosa el otro día en el parque. Hace meses que voy a la misma plaza con mis perros y siempre nos juntamos con los otros dueños mientras ellos juegan y se pusieron a hablar de la serie sin saber quién era yo. En un momento pensé que lo estaban haciendo a propósito para que yo diga algo pero no, nadie se percató en ningún momento de que yo era quien hacía de Fabi. 

-¿Cuál fue la escena más difícil de rodar?

-La escena del agua, la que estamos con Ivos metidos en una pileta. Pero no por su contenido, sino porque estuvimos seis horas adentro del agua sin poder pisar el fondo, sin climatización porque la tuvieron que apagar porque hacía mucho ruido para los micrófonos. Yo iba por la pileta moviéndome entre plano y plano con un tecito caliente pero sin tomarlo, solo para tener algo calentito entre las manos. Actuar en esas condiciones te saca del enfoque del personaje porque tenés otros problemas como mantener tu cuerpo a flote, no ahogarte, lidiar con el frío, entonces hay un montón de cosas que se interponen y hacen más difícil todo. Igual después la vi y no salió tan mal, pero sí fue muy difícil hacerla.

-¿Pudiste conocerlo a Fito?

-Sí, yo a Fito ya lo conocía pero nunca había hablado con él. Me lo había cruzado en un par de lugares, pero nunca me había acercado, digamos que lo miraba de lejos. Pero para la serie fuimos a su casa y fue maravilloso. El era uno más de nosotros, tomamos un té con masitas, hablamos de la vida, de la serie, de la vida del actor hasta que en un momento dice: “Bueno, yo tengo una cena con mi novia pero ustedes quédense acá. Pidansé comida, disfruten de la casa, charlen tranquilos”. Nosotros no queríamos y él insistió tanto que nos quedamos. Me acuerdo que se fue y dijo: “chau familia”, y nosotros nos quedamos parados, sin sentarnos mirando todo a nuestro alrededor. Hasta que Ivos dijo: “Che, hagámonos cargo de esta situación. Pasemoslá bien o vayámonos”. Y ahí nos relajamos, tocamos su piano; fue muy loco y divertido a la vez.

-¿Qué significó para vos este papel y el poder vincularte con tus máximos referentes del rock, esos a los que escuchabas de chica?

-Un sueño hecho realidad, porque yo era fanática del rock, siempre lo fui y, de hecho, lo soy. Por eso para mí poder interpretar este personaje y a la vez estar con las figuras que siempre admiré fue una locura. De repente, mi cerebro enloquecía porque estaba haciendo de una persona que amo y al lado mío estaba otra persona haciendo de Charly (que le salía exactamente igual) y por otro lado, Ivos haciendo de Fito, realmente fue un flash.

-¿Te gustaría hacer de Fabi en otra serie, ya sea en su propia biopic o en la de otro rockstar?

-¡Uy, ojalá! Me encantaría hacer de ella de nuevo, aunque no me gustaría quedar encasillada. Eso es lo único que no quiero que suceda porque tengo un abanico de personajes que sé que puedo hacer y de cosas y emociones por mostrar. De hecho, ahora estoy a punto de grabar una novela para tele, arranco en estos días. No puedo contar nada por ahora.