Así ha sido la salida de Marta Luisa de Noruega de la familia real

 

El anuncio llegó hace unos días cuando la propia casa real anuncio que Martha Luisa se retiraría de sus deberes reales para concentrarse en el negocio de la medicina alternativa que dirige con su prometido, el gurú espiritual norteamericano Durek Verrett. Con 51 años y cuarta en la línea de sucesión al trono, el comunicado contaba que Martha siempre tuvo un enorme interés por los métodos alternativos de tratamiento medicinales, los cuales considera importante complemento para ayudar desde el establecimiento médico convencional.

 

Primera hija de los reyes Harald V y Sonia de Noruega, en 2022 se casó con el escritor danés, Ari Mikael Behn con quién tuvo tres hijas. Desde su matrimonio, la princesa pasó de ser tratada como Su Alteza Real la princesa Marta Luisa de Noruega a Su Alteza la princesa Marta Luisa de Noruega; sin embargo su papá definió que ella no adoptaría el apellido de su mardio y que conservaría el título, a pesar de casarse con un hombre de menor rango que ella. Después de 14 años de matrimonio, la pareja se divorció y Ari Mikael Behn -tras una fuertísima depresión- terminó quitándose la vida el 25 de diciembre de 2019.

Fue en junio de 2022 que Martha Luisa anunció su compromiso con el chamán norteamericano Durek Verret, con quien inició un negocio de medicina alternativa y realizan  seminarios juntos en donde ofrecen meditaciones y ejercicios chamánicos para revelarte tu yo divino activado. Verrett, además autor del libro Spirit Hacking, ofrece sesiones de sanación chamánica y vende un optimizador de espíritus (222 dólares) que, de acuerdo a él, "invita protecciones espirituales y energéticas que te mantienen a salvo de energías externas".

El comunicado, difundido el martes de esta semana, anuncia que la renuncia de la princesa a sus deberes reales “pretende trazar una línea divisoria que separe más claramente la actividad comercial de la Casa Real de Noruega”, y argega: "el objetivo es tanto evitar malentendidos con respecto a la Casa Real como permitir a la Princesa y Durek Verrett una mayor libertad en sus actividades comerciales y otras partes de sus vidas”.