Silvina Luna: habló Pancho Saavedra, el primer periodista que investigó a Lotocki
En 2009, el periodista chileno Pancho Saavedra investigó a Aníbal Lotocki con una cámara oculta en su país, ya que sospechaba de los métodos quirúrgicos que utilizaba.
7 de septiembre de 2023 • 11:06
Silvina Luna: habló el periodista chileno que investigó a Lotocki con una cámara oculta. - Créditos: Instagram.
A horas de haberse concluido el procedimiento de la autopsia del cuerpo de Silvina Luna, que busca dar respuesta a cuáles fueron las causas de la muerte de la actriz de 43 años, un nuevo hecho involucra al principal acusado de su fallecimiento: Aníbal Lotocki.
El médico, que está inhabilitado para ejercer la medicina, fue investigado por el periodista chileno Pancho Saavedra quien, en 2009, decidió colocarle una cámara oculta frente a las crecientes sospechas sobre sus métodos quirúrgicos.
La cámara oculta del periodista chileno a Lotocki
Silvina Luna falleció a los 43 años.
En 2007, Romina Vega murió en Posadas, Misiones. La joven de 21 años falleció tras realizarse una cirugía plástica con Aníbal Lotocki, mediante la cual, el médico le prometió extraerle la grasa de su abdomen para aplicársela en los glúteos. En la causa penal que investigó su muerte el cirujano quedó absuelto. Sin embargo, este hecho lo impulsó a irse del país e instalarse en Chile, acompañado de su pareja en aquel momento, Pamela Sosa.
Ya en 2009, dos años más tarde, el médico -que está inhabilitado por la Justicia para ejercer la medicina- contaba con una numerosa clientela, entre las que se encontraban varias mujeres de la farándula chilena. Este hecho llamó la atención de Pancho Saavedra, un periodista chileno especializado en espectáculos quien no dudó en investigar qué había detrás de esta creciente demanda estética.
Mariano Caprarola tenía 49 años y se había realizado la misma cirugía que Silvina Luna, con Aníbal Lotocki. - Créditos: Instagram/@caprarolamariano.
Saavedra escuchaba cada vez más frecuente una palabra: metacril, la sustancia que Lotocki le inyectó a Silvina Luna. Y decidió accionar: le hizo una cámara oculta al médico que reveló los polémicos métodos quirúrgicos que realizaba.
Debido a la lamentable muerte de Silvina Luna el pasado jueves 31 de agosto, en Socios del Espectáculo, el programa conducido por Rodrigo Lussich y Adrián Pallares, se contactaron con el periodista chileno para ahondar en más detalles sobre su investigación.
“En un principio, como en todos lados, esto era una cosa estética que se empezó a poner de moda, pero nadie se estaba preguntando qué era lo que realmente este tipo le estaba poniendo a las personas. Y también pasó que el compuesto metacril, el metacrilato, al menos acá en Chile por el Instituto de Salud Pública no estaba aprobado para usarse en intervenciones. Ni en el rostro ni mucho menos en el cuerpo, ni en esas cantidades que él ponía”, comenzó diciendo Saavedra en vivo con el programa de El Trece.
Una captura de la cámara oculta que utilizó Saavedra para investigar a Lotocki.
“Para poder descubrir todo esto, yo le hablé como si fuera un paciente que me quería hacer una intervención y así registrar el lugar donde él ya había intervenido a muchísimas mujeres del espectáculo acá en Chile. Muchas fueron intervenidas, lamentablemente sin ninguna condición de salubridad, de higiene... Era el departamento de Pamela Sosa”, detalló el periodista.
“En aquel momento, en todos los canales de televisión hablaban de las pompas, de los glúteos de las chicas de la farándula, pero nadie se preguntaba lo que podía llegar a pasar realmente... Entonces una cirujana plástica me dijo: ‘Oye, esto que todas las mujeres del espectáculo se lo quieren poner, ojo, porque eso nunca se ha utilizado para rellenar zonas tan grandes como los glúteos’”, recordó Saavedra, sobre cuáles fueron los motivos que lo impulsaron a investigar al cirujano.
A la vez, recordó que en ese momento “Pamela era una vedette que trabajó en un par de revistas aquí, cuando llegó con Lotocki. Ella se hace conocida por eso y también y por los escándalos. Estaba en las primeras planas de los programas”.
Pancho Saavedra, el periodista chileno que le puso una cámara oculta a Lotocki.
Para poder llevar adelante la cámara oculta, Saavedra le pidió un turno para hacerse una intervención: “Me pidió que se la abonara en dólares y en efectivo, que no podía quedar ninguna transacción hecha. 2.000 dólares cobraba una intervención en la que le había pedido un poco de pantorrilla y un poco de glúteos”, recordó. El periodista fue con tres cámaras ocultas, escondidas entre los anteojos y los botones de su camisa, que le permitieron registrar todo y avanzar con la investigación.
“Él me dice: ‘Puedes acostarte en esta cama’. Y era en una pieza normal, estaba el colchón, había un perro que estaba saltando ahí entremedio. Después él agarra varias botellas de líquidos, de más de dos litros, y se va al baño a mezclar, empieza a mezclar. Eso me llama la atención porque no estaban las condiciones de higiene y además el metacril no viene en esas botellas”, continuó Saavedra.
“¿Él ya te iba a operar en ese momento?”, le preguntó Rodrigo Lussich. “Sí, sí, claro. Cuando empiezo a registrar todas estas imágenes, me dice: ‘Acuéstate ahora, te voy a anestesiar un poco’. Y le digo: ‘Doctor, se me olvidó el dinero en el auto, quiero por favor ir’. Yo tenía programado en ese momento escapar, porque tampoco iba a dejar que me tocara, solo quería registrar”, agregó el periodista.
La difusión de la cámara oculta resultó en un juicio: Saavedra acusaba a Lotocki por “ejercer ilegalmente la profesión de cirujano plástico”, mientras que el médico acusaba al periodista por la cámara oculta. Una mediación entre las partes disolvió los juicios, pero obligaron al médico a volver a la Argentina, ya que en Chile le aplicaron una especie de condena social y mediática. “A partir de esto, él tuvo una especie de ‘sanción mediática’ y mucha gente hizo marcha atrás para no intervenirse con este señor. Su ida fue muy mediática y la Justicia chilena, además, le impidió volver al país. Esto hizo que quedara muy claro el tema de las inyecciones de metacril y el daño que podría llegar a provocar”, relató Saavedra.
“Cuando pasan los años y uno ve las personas que han muerto, me van a tener que perdonar, pero uno tiene que poner el grito en el cielo y decir: ‘¿Por qué este tipo no está preso?’”, reflexionó Saavedra. Para terminar, no dudó en comprometer a la ex pareja del médico, Pamela Sosa: “Me llamó la atención que fuera a gritar a la casa de Lotocki después de la muerte de Silvina Luna. Yo creo que la gente se puede arrepentir de las cosas que pudo haber hecho en su momento, pero ella fue cómplice, ella estuvo al lado de él, ella hacía los contactos con las chicas. Y cuando le tocó enfrentarse conmigo, me denostó, me trató de ignorante, me hizo juicio. Ella le facilitaba el departamento. Díganme ustedes, ¿qué persona en su sano juicio le facilita su departamento a un cirujano plástico para que le haga intervenciones a personas sin que este sea un pabellón o una clínica o un lugar que tenga las condiciones?”, concluyó el periodista.