Cada vez lo sabemos con mayor certeza -y está comprobado científicamente-: nuestra piel está constantemente expuesta a la radiación solar. Es susceptible tanto a los rayos UVB, que con una longitud de onda más corta penetran en la unión de la epidermis y la dermis, como a los rayos UVA, cuyas longitudes de onda más largas penetran más profundamente. Sin embargo, hay un nuevo tipo de contaminación a la que deberíamos comenzar a prestar atención. Se trata de la contaminación electromagnética o electropolución, un agente ambiental invisible y luminoso que los diversos aparatos electrónicos irradian y que producen el "envejecimiento digital".
"En el rango de la luz visible hay una región de luz azul de frecuencia relativamente alta llamada luz azul visible de alta energía (High-Energy Visible Light o HEV por sus siglas en inglés), que penetra toda la profundidad de la piel y la daña. La exposición a largo plazo a la luz azul también produce respuestas fisiológicas similares a los daños causados por los rayos UVB y UVA y genera estrés oxidativo que, a su vez, conduce a la citotoxicidad en las células cutáneas humanas", explica la Dra. Lelia Nudelman, Farmacéutica y Directora de Laboratorio Carthage.
La contaminación electromagnética afecta a personas de todas las edades y de cualquier continente. Basta con decir que prácticamente no se puede vivir sin estar conectados. Las cifras son elocuentes al respecto: se estima que el 60% de las personas pasa más de 6 horas al día frente a dispositivos digitales y que, en promedio, cada uno cuenta con 4 dispositivos electrónicos.
¿Sorprendida? Te contamos más. Entre algunos de los síntomas visibles del envejecimiento digital se encuentran:
la pérdida de firmeza y elasticidad de la piel por la disminución de la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico.
el deterioro de las membranas celulares
la aparición de manchas por la sobreproducción de melanina que propicia la luz emitida por las pantallas de los celulares
la deshidratación y la flacidez en la piel del rostro que causan las ondas electromagnéticas generadas por las computadoras
las alteraciones en el ADN de las células de la piel que pueden conducir a la muerte de células.
Desconectate
Para que tengas un panorama completo y tomes las medidas necesarias de cuidado de tu piel, te acercamos un datito más. Pasar 8 horas diarias durante 4 días frente a una computadora es equivalente a 20 minutos expuestos al sol a mitad del día sin filtro solar. ¿Qué hacer entonces?
Para empezar, no te saltees nunca tu rutina de limpieza, hidratación, nutrición y reparación. Esto permite purificar las capas de la piel de cualquier acumulación de polución, y también ayuda a protegerla de las agresiones externas. Es importante comenzar con un limpiador para eliminar cualquier contaminante, suciedad o maquillaje, antes de continuar con los productos que se centran en la hidratación y la protección. Además, es indispensable aplicar todos los días protector solar. "Está confirmado que la luz que emiten los monitores de las computadoras y las pantallas led, produce una radiación térmica que altera las células de la piel, entre ellos, los melanocitos, que son los productores de las manchas. Para prevenir estos problemas, recomiendo usar el protector solar indicado para cada tipo de piel y descansar de la pantalla cinco minutos cada hora. Además es bueno consumir alimentos que contengan antioxidantes", sugiere la médica dermatóloga Dra. Laura Mijelshon, directora del Centro Piel y Estética.
El uso de cosméticos que contengan antioxidantes pueden ayudar a frenar el envejecimiento digital, ya que hacen de barrera frente a las agresiones externas. Buscá cremas, serums y geles que contengan un alto porcentaje de agua termal, ácido hialurónico, minerales y sustancias calmantes e hidratantes dermatológicamente testeados.
Powerful-Strength Line-Reducing, concentrado anti-arrugas anti-oxidante de larga duración, previene daños externos y envejecimiento, $1800, Kiehl´s. Blue Tech Defense emulsión de día y máscara de noche, previene el envejecimiento digital $720 y $600, Carthage
Slow Age crema (con FPS 30), para pieles normales a secas, contiene ácido hialuronico y glicerina, $1226, Vichy. Age reverse, ofrece triple acción antiaging: antipolución, remodelante y antiglicación, $1440, Isdin
Absolut Collagen Repair, emulsión que reduce la profundidad de líneas finas y arrugas, $535, Idraet. Clearskin mascarilla facial negra con minerales, $180, Avon. Fresh pressed, booster de vitamina C, Clinique
Aceite facial y corporal de rosa mosqueta, para pieles secas y/o maduras, disminuye manchas, unifica el tono, y la textura de la dermis, $561, Boti-k. Fluido facial multiprotector FPS 50 hidrata y combate la contaminación, $543, Natura Chronos
Una clave para disminuir los daños de la tecnología en el organismo es preservar los lugares donde descansamos. "Es importante mantener el teléfono móvil lejos de la cabeza y del cuerpo siempre que sea posible, apartar con frecuencia los ojos de la pantalla de la computadora y no abusar de la contracción de los párpados para evitar las arrugas antiestéticas alrededor de los ojos. En el caso de los más chicos, tratar que utilicen pantallas digitales sólo cuando sea estrictamente necesario. Realizar actividades al aire libre es muy útil para equilibrar", indica Nudelman.
Expertas consultadas: Dra. Laura Mijelshon, Médica Dermatóloga de la Universidad de Buenos Aires y directora del Centro Piel y Estética. Dra. Lelia Nudelman, Farmacéutica y Directora de Laboratorio Carthage.