Cometa verde: este es el impacto de su energía en cada signo del zodiaco

¿Qué podemos leer los astrólogos sobre este sorpresivo cometa verde? Pues varias cosas, y todas basándonos en un libro de 1587 llamado “El libro de los cometas” que los clasificaba según su forma, su color, su posición en el cielo y su brillo.

Empecemos con el color. Nuestro cometa es en realidad verde y blanco, los colores de Júpiter y de Mercurio, planetas del pensamiento, las ideologías, el conocimiento y la comunicación. En estas áreas probablemente notaremos pequeños cataclismos.

¿Y cómo se fue moviendo? Pues alrededor del 21 de enero se lo podía ver cerca de Draco, la constelación con forma de dragón que se extiende entre la Osa Mayor y la Osa Menor. Durante las noches siguientes el cometa se deslizó a lo largo de la cola del dragón, y para comienzos de este mes se ubicó directamente entre la "copa" de la Osa Mayor y Polaris, la Estrella Polar. Para el Libro de los Cometas ésto es como decir que el cometa verde partió del arquetipo del Dragón para llegar al arquetipo del Oso. El Dragón -Draco- en China se asociaba con el emperador. En América con la serpiente emplumada. Y en el Apocalipsis con Satanás. Lo esencial es que en los relatos míticos occidentales el dragón puede cumplir dos funciones: devorador o guardián. Lo que está claro es su potencial poder de destrucción. Podemos asociarlo con Marte y con Plutón, planetas del deseo y la guerra.

¿Y la Osa? La Osa se asocia con Zeus, el rey de los dioses del Olimpo también llamado Júpiter. Y Júpiter es la guía, la salida, la dirección, la esperanza. Ojalá ese sea el anuncio, que el Dragón no destruirá, que será guardián y que finalmente se asociará con la Osa, para cuidarnos y mostrarnos otro rumbo.

Esta semana, en la que el cometa se ve desde nuestro hemisferio, se inició con Luna Llena en el signo de Leo, un signo de fuego. También es notable que Venus está en cuadratura con Marte, es decir que el amor va en una dirección y el deseo físico en otra. Veamos cómo afectarán estas energías en el plano individual:

Los signos de Fuego -Aries, Leo y Sagitario- tendrán que escuchar a su corazón. Seguir sus “corazonadas” es la consigna, no dejar que el enojo o la atracción física los distraiga.

Los signos de Aire -Géminis, Libra y Acuario- tendrán que tomar partido y elegir. Prohibidísimo jugar a dos puntas. Sin dudar y sin dar rodeos.

Los de Tierra – Tauro, Virgo y Capricornio- necesitan encontrar urgente un nuevo equilibrio. No olvidemos que el núcleo de la Tierra (de metales fundidos) está girando en sentido contrario al que tuvo históricamente y eso los marea. Nada es como antes y hay que adaptarse ya.

Y los de Agua -Cáncer. Escorpio y Piscis- van a necesitar cierto aislamiento para no dejarse arrasar por el caos del mundo. Los ayudará Júpiter, o sea la fe en algo o en alguien que les muestre la luz, la salida del túnel, la verdad.

El día 10 será posiblemente el más “fogoso” de todos, cuando el cometa se acerque a Marte. Pero ya el 14, justo el día de los enamorados, nuestro amigo verde orillará Tauro y cambiará el clima cósmico. El afuera y el adentro estarás más serenos, más estables, más aptos para la diplomacia, la belleza y el amor que para el enfrentamiento.

¡A acompañar el ritmo de los astros, entonces, y que el fuego verde nos de energías de vida y esperanza a cada una de nosotras… y al planeta!