Luna nueva en Sagitario: este es el impacto que tendrá en cada uno de los signos

Cada mes, el Sol y la Luna se encuentran en el mismo grado de un signo. Este momento es el que llamamos Luna Nueva y, simbólicamente, combina la llegada de un mensaje de nuestro inconsciente (personal y colectivo), representado por la Luna, que es necesario integrar a la parte consciente y voluntaria: la energía del Sol.  Son instancias en las que, si estamos atentas, le podemos dar una vuelta de tuerca más a nuestro autoconocimiento.

Esta Luna nueva se da en el grado 20° de Sagitario. El momento de mayor cercanía entre las dos luminarias será a las 20:31, hora Argentina, del martes 12 de diciembre, y tendrá la participación de planetas invitados.

Cuando hablamos del lado inarmónico de Sagitario mencionamos su tendencia a desconectarse de la realidad, ya sea por negación o por exageración.

La Luna Nueva de mañana se da en cuadratura con Neptuno, un planeta con muchas virtudes pero que, cuando está en tensión (como en este caso), puede borronear límites y aportar confusión y nebulosa. 

Es probable que la sensación de búsqueda de sentido, de una filosofía que nos haga creer en el futuro, de una mirada más amplia y de ganas de volvernos más y más sabias choque en muchos momentos con la desorientación, el desorden, la niebla mental y las conductas erráticas.

Además, poco antes de encontrarse con el Sol la Luna hace un contacto exacto con Marte, que está en 13° de Sagitario. Este planeta se encuentra en buen estado por triplicidad (porque es regente de Aries, otro signo de fuego como Sagitario) pero no en su mejor forma, porque puede estar un poco desconcentrado y con falta de foco.

Esa luz que la Luna toma de Marte la aporta a la solar cuando se produce el encuentro de la Luna nueva. En conclusión, en este nuevo comienzo nos costará hacer pie en la realidad, pero un desafío no implica imposibilidad. Solo nos va a requerir estar más atentas que nunca para poder desplegar el potencial sagitario que se nos ofrece.

En todas las personas, la energía de cada Luna Nueva se suele sentir intensamente. Es una excelente oportunidad para reconocer qué objetivos queremos plantearnos para los próximos seis meses y cómo podemos hacer para verlos crecer. 

Es un momento de introspección, en el que podemos sentir una alineación entre aquello que elegimos expresar de nuestra identidad y nuestras necesidades más profundas. 

Se trata de una instancia excelente para plantearnos con qué nos identificamos, qué queremos de nosotras mismas y de nuestros vínculos y qué necesitamos profundamente para satisfacer nuestro bienestar emocional.

También, recordemos que más allá de la preponderancia de nuestra energía de Sol, Luna y Ascendente, los doce signos viven en mayor o menor proporción en cada una de nosotras, por lo que todos los eventos planetarios nos repercuten en alguna medida. 

Si tenés a mano tu carta natal, podés sacarle más provecho a esta información buscando en qué casa se localiza el grado 20° de Sagitario, y si tenés planetas o comienzos de casas entre los grados 16° y 24°.

Puntualmente, este eclipse es particularmente importante para las sagitarianas de Sol, Luna o Ascendente, que son las protagonistas del evento y que pueden sentir una invitación a replegarse y estar en soledad para recibir una etapa llena de promesas. 

Otros signos beneficiados directamente son Aries y Leo, los de fuego. Van a tener un momento de claridad, y será importante que respeten su necesidad de mirar hacia dentro, meditar, aislarse de las energías externas por un ratito y conectarse con sus necesidades genuinas.

Libra y Acuario, como signos de aire que hacen contactos fluidos con Sagitario, se ven movilizados emocionalmente, lo mismo que Géminis, su opuesto complementario, que probablemente pueda plantearse nuevos rumbos después de lo que dejó atrás con su Luna Llena, del 27 de noviembre en adelante.

Tauro, Cáncer, Escorpio y Capricornio pueden sentirlo como un cimbronazo o llamado al comienzo de una nueva etapa desde la reflexión y la mirada interior. 

Virgo y Piscis, finalmente, van a sentir un tironcito que puede ser revelador pero doloroso. Deben prestar atención a la casa en que sucede para entender en qué área de vida va a reflejarse.