Fotobioestimulación LED: ¿puede regenerar la piel?

Según explica María Daniela, la fotobioestimulación LED es “un tratamiento que utiliza luz visible y no visible para obtener un efecto terapéutico y es bien conocido por sus efectos regeneradores en la piel y las articulaciones”.

La experta detalla: “Actúa acelerando los procesos celulares naturales, haciendo que la célula sea más eficiente en su trabajo y aumentando su metabolismo, así como el flujo sanguíneo, lo que lleva a una mayor oxigenación del tejido, intercambio nutricional y revitalización de la piel”.

Al mismo tiempo, sostiene que está clínicamente probado que “la irradiación de la cara con diferentes longitudes de onda de luz, emitida por las fuentes LED de última generación ayuda a mejorar el rostro beneficiando a todo tipo de piel”.

En particular, algunos estudios demostraron que más del 80% de las personas que realizaron al menos un ciclo de fotoestimulación disminuyeron las líneas finas faciales y que el 75% logró mejorar la flaccidez.

Si bien es posible registrar resultados visibles desde la primera sesión, María Daniela indica que “el tratamiento con fototerapia o fotobioestimulación LED generalmente requiere protocolos de diferentes sesiones, que varían según lo que se necesite tratar”.

“Los tratamientos de fotobioestimulación con LED no son invasivos y además son indoloros y, si se llevan a cabo con equipos de última generación, no requieren ningún contacto directo con la piel, ya que existe una distancia que permite mantener suficiente densidad de energía de las fuentes de LED para estimular el tejido objetivo”, explica la experta.

Al mismo tiempo, resalta que los protocolos posibles sirven para complementar tratamientos de acné y rosácea, fotoenvejecimiento, melasma (manchas) y poros dilatados, así como afecciones en la piel que cursen con procesos inflamatorios.

María Daniela se muestra muy optimista respecto de los nuevos descubrimientos que la ciencia ha dado a conocer: “La capacidad de diferentes longitudes de onda para penetrar a diferentes profundidades en la piel y el cuerpo y activar múltiples mecanismos terapéuticos llevó a los investigadores a estudiar las diferentes propiedades de la luz. Como resultado, encontraron que aporta beneficios también en el campo de la neurología”.

En este sentido, refiere un estudio realizado por la Universidad McGill en Montreal de Canadá, en el cual se demostró que la luz LED se puede utilizar para regular la función neuronal, aumentando el bienestar de una persona.